En 2020, la Unión Europea adoptará una norma de emisiones contaminantes todavía más exigente, y ya ha puesto a sudar a muchos fabricantes de autos. Fiat Chrysler Automobiles encontró una solución para bajar el promedio de emisiones de CO2 de su marca: pagarle a Tesla para que sus autos eléctricos se contabilicen como parte de la gama de FCA en Europa.
La mayoría de las marcas de FCA venden modelos con motores muy grandes; entre la lista veremos firmas como Maserati, Jeep o Alfa Romeo. Aunque la apuesta del gigante italoamericano es hacia la electrificación, su gama actual no le permitiría llegar al límite de 95 gramos por kilómetro que establecerá la Unión Europea en 2020.
De acuerdo con Reuters, la operación fue de cientos de millones de euros. Fiat Chrysler Automobiles aseguró estar comprometida con reducir las emisiones contaminantes y por eso analizó todas las opciones de cumplimiento que ofrecen las regulaciones. "Después de todo, el objetivo principal es aprovechar las formas más rentables de reducir las emisiones globales de gases de efecto invernadero en el mercado".
Las regulaciones europeas le permiten a los grandes grupos automotores compensar el promedio de emisiones con sus marcas internas, pero también abre la puerta a acuerdos entre distintas marcas. No sería la primera vez que Tesla vende "créditos de emisiones" a otras marcas; según fuentes citadas por Reuters, la firma de Elon Musk ha recaudado así más de mil millones de dólares en los últimos 3 años.