¡Regresó, y regresó a lo grande! 25 años después de su debut original, el Acura NSX está de vuelta con un V6, dos turbocargadores y tres motores eléctricos para demostrarnos cómo el futuro y la diversión al volante no están peleadas, aunque así nos lo hayan planteado otros fabricantes por años.
El nuevo Acura NSX, desarrollado y producido en Estados Unidos, se presenta en el Auto Show de Detroit por fin como modelo de producción, tras haber pasado cerca de tres años de desarrollo intensivo en el estudio de diseño y en los talleres que el fabricante japonés tiene en Raymond, Ohio.
Funcionalidad ante todo
Bien podría pensarse que crear un deportivo significa dar rienda suelta a las ideas más descabelladas de sus ingenieros y diseñadores —que sí, sucede un poco— pero la gente detrás del desarrollo del Acura NSX encontró la cordura entre toda la locura que representa de crear un coche con tres motores eléctricos y dos turbcargadores.
Lo que ante los ojos comunes es un diseño caprichoso, para los ingenieros de Acura es más bien funcional. Las proporciones bajas y anchas del Acura NSX no sólo son así para rendir tributo al modelo original, también entra en juego la aerodinámica, que en este caso va más allá de romper con mayor facilidad el viento.
Bien sabemos que el Acura NSX sufría problemas respiratorios —o mejor dicho, de ventilación—, pero para eso son las fases de prueba, para que el modelo de producción no tenga mayores problemas. Las tomas de aire que vemos por doquier no son meramente accesorios deportivos; tienen la función de alimentar al motor y ayudarle al coche a mantener las llantas sobre el asfalto con ayuda del kit aerodinámico compuesto por alerones, faldones y spoilers.
Una de las mejores cartas de presentación del Acura NSX es su ligereza. La marca lo presenta como el primer superauto hecho completamente de aluminio, aunque evidentemente hay presencia de otros materiales, como aceros de ultra alta resistencia en zonas específicas o fibra de carbono para el suelo del coche. Al final, la estructura promete soportar las fuerzas torsionales y de flexión que el auto requiere para dar la vida en el circuito.
Un poco de esto, de eso y de aquello
¿Cómo debe ser el corazón del Acura NSX? ¿De aspiración natural, eléctrico, turbocargado o un poco de todo? Pues así. La gente de Acura decidió que la nueva generación del NSX tendría un motor de 6 cilindros en V a 75º con dos turbocargadores y asistido por tres motores eléctricos, uno para el eje trasero y los dos restantes colocados en cada llanta delantera. Para volverlo aún más interesante, el motor de combustión interna fue colocado longitudinalmente, para lo que se tuvo que el modelo de producción se tuvo que alargar 76 mm y ensanchar 25 mm.
La transmisión encargada de mandar la fuerza a las cuatro llantas es una automática de doble embrague y 9 cambios. El sistema de tracción integral corre a cargo del sistema Super-Handling All-Wheel Drive (SH-AWD) con la particularidad de poder entregar torque instantáneo al eje delantero gracias a la presencia de los dos motores eléctricos. Todavía no se dan a conocer cifras oficiales de desempeño —ni de potencia, de hecho— pero el auto deberá alcanzar los 100 km/h en menos de 4 segundos. Más cercana la fecha de comercialización se revelarán el resto de los detalles.
Opcionalmente, el Acura NSX se ofrecerá con el paquete Advanced Sports Package, que coloca los componentes de la fuente de poder (motores y paquete de baterías) en un punto más bajo para reducir el centro de gravedad y mejorar el comportamiento en curvas.
A través del Integrated Dynamic System, el Acura NSX puede ser conducido en cuatro modos de conducción: eléctrico, deportivo, muy deportivo, deportivo que se te va de las manos... o, como ellos lo denominan: Quiet, Sport, Sport+ y Track. El sistema ajusta motores, transmisión y la respuesta del chasis, así como el volumen del sonido del motor. También ofrece el modo Launch, donde los cuatro motores entran en acción.
De lo 'cool' a lo ergonómico
Por dentro, el Acura NSX es un punto de encuentro entre lo deportivo y el futuro, pero el objetivo de su diseño —al menos al principio— no es ése. Todo en el habitáculo del NSX está pensado para quedar al alcance del conductor, con controles simples e intuitivos y asientos sumamente ergonómicos. La gente de Acura también sabe que subirse y bajarse de los deportivos suele ser un happy problem, pero pese a ser bajo, el NSX promete facilidad de acceso.
El cuadro de instrumentos está compuesto por un display TFT que se adapta de acuerdo con el modo de conducción seleccionado. La consola central mantiene el botón de encendido rodeado de los demás mandos y la perilla del Integrated Dynamics System. El resto son puras comodidades modernas, como navegación, un buen equipo de sonido y climatizador.
Producción y precio del Acura NSX
Si caíste enamorado del nuevo NSX y mueres por adornar tu garaje con uno, la compañía comenzará a aceptar pedidos a partir del próximo verano, al menos en Estados Unidos. Las primeras entregas se llevarán a cabo a finales de este mismo año. El precio no se ha detallado, pero tan pronto el verano se acerque, los detalles se irán dando a conocer y actualizaremos este apartado.
El Acura NSX será fabricado exclusivamente en el Performance Manufacturing Center que la marca tiene en Marysville, Ohio, con aproximadamente 100 asociados que contribuirán en la construcción del chasis, de la pintura y del ensamblaje.
En Motorpasión México | Después del quemón regresa el Acura NSX al Nürburgring