Si hoy en una plática casual te digo el termino hot hatch, saltarán a tu mente nombres como Volkswagen Golf GTI, Ford Focus ST o RS, SEAT León Cupra, Renault Megane R.S, Mercedes-Benz A45 AMG, etc. Sus características van desde motores turbo, tracción en las cuatro ruedas en algunos casos, un look deportivo y la capacidad de emocionarte con un auto que técnicamente es accesible y te brinda sensaciones que en sus versiones cotidianas jamás tendrías.
Como ha pasado en todo segmento automotriz, estos objetos de deseo no llegaron a ser las leyendas y juguetes para adultos que son hoy de un día a otro, evolucionaron lentamente y hoy queremos que nos acompañes a recordar cómo eran en la década de los 80, un punto en el que ya comenzaban a hacerse de un lugar más grande en el corazón de los petrolheads.
Para entender un poco mejor debemos regresar a los principios de la década de los 70, cuando una crisis petrolera hizo que se disparara el precio del petróleo y por consecuencia el de la gasolina, ese efecto golpeó a los principales fabricantes de autos, por lo que se vieron obligados a producir autos más ligeros, con motores más ahorradores, menos potentes y pequeños. Si bien en Europa los autos tendían a ser no tan grandes como en Estados Unidos, esta crisis hizo que sus ya compactos y estilizados autos, tuvieran que encogerse un poco más. Y es en este continente donde los hatchback y especialmente los hot hatch tendrían su origen.
Continuaron pasando los años y la mayoría de los autos con grandes ventas solo se enfocaban en trasladarnos con el menor uso de combustible posible, las características emocionantes de un auto quedaban relegadas a aquellos que podían darse el lujo de pagar más por el combustible y por un auto de altas capacidades. Sin embargo, el entusiasmo de unos, la búsqueda de algo más llamativo y emocionante de otros, y la oportunidad de mercado que significarían estos productos, hicieron que propuestas de autos comunes con unos cuantos retoques visuales y motores con un poco más de potencia se convirtieran en un hit que hasta la fecha sigue creciendo, especialmente entre consumidores jóvenes. A continuación recordaremos algunos de los más famosos y otros pocos que llegaron a rodar en nuestro país.
Fiat Uno Turbo i.e (1985)
Hoy si pensamos en el Fiat Uno, tendremos la imagen de un subcompacto urbano con una suspensión un poco alta, con un motor ahorrador y más enfocado en el ahorro y comodidad que en el ofrecer sensaciones deportivas.
Sin embargo en 1985, Fiat presentaba un pequeño hatchback con motor turbo de cuatro cilindros y 1.3 litros que generaba 106 hp y 108 lb-pie de torque. Un peso de 846 kg y una aceleración de 0 a 100 km/h de 8,3 segundos.
Al igual que otros modelos contemporáneos visualmente destacaba por una franja contrastante en los costados, rines de diferente diseño y una fascia delantera con algunos cambios. De este modelo existieron tres versiones, una más bajo la misma generación que llegó en el 89 y otra que apareció en los 90, con más potencia.
Ford Fiesta XR2 (MK1) / Ford Fiesta Turbo
En 1976 se fabricó la primera generación del Fiesta, un auto urbano que poco podía hacer para emocionar, sin embargo a inicios de los 80 se pensó en una versión que tuviera un mayor appeal para los jóvenes y amantes de la velocidad, de ahí nació el XR2 que en 1981 comenzó a conquistar miradas. De deportivo tenía más que nada el look con faros más grandes, rines de mayor tamaño, un frente más robusto y una contrastante línea roja o negra, dependiendo el color dominante, que recorría los laterales del auto. Se impulsaba gracias a un motor de cuatro cilindros y 96 hp que se acoplaba a una transmisión manual de cinco marchas, enviando el poder al eje delantero. Su peso era de apenas 880 kg, Aún así lograba el 0 a 100 km/h en menos de 9.5 segundos.
Más adelante con el restyling llegó el MK2 deel XR2 ahora con un motor de 110 hp, asientos deportivos y otras adiciones que lo harían un objeto de deseo de esa época.
Sin embargo, a finales de los 80, en 1989, para ser precisos, llegó la tercera generación del Ford Fiesta y con ello una versión que se presento ese mismo año con la denominación Turbo. El primer fiesta con turbo capaz de generar 131 hp y una aceleración más adictiva. A pesar de que brillara en los 90, merecía la pena ser mencionado aquí.
Peugeot 205 GTI
Sí algo saben hacer los fabricantes franceses, son autos con una estética envidiable y el 205 GTI es un claro ejemplo. El Peugeot 205 nació en 1983, en 1984, se presentó la versión GTI que equipó un motor de cuatro cilindros 1.6 litros, 105 hp y 97 lb-pie de torque, que le aseguraban una aceleración de 0 a 100 km/h en solo 8.6 segundos. Por si fuera poco, pesaba solo 850 kg.
En su época destacó por ser ágil, tener una dirección precisa y una suspensión muy dura en los primeros modelos. En 1985, recibió una pequeña actualización con una suspensión más suave. Sin embargo, el modelo que le valió el título para coronarse como uno de los mejores hot hatch de os 80, llegó en 1986, cuando se presentó una versión con un motor de 1.9 litros que elevaba su poder hasta los 130 hp, sistema fuel injection, frenos de disco en las cuatro ruedas y un interior mitad tela, mitad piel y cristales eléctricos. Toda una joya que hoy puede costar más del doble de lo que llegó a valer en 1986, codiciada por algunos coleccionistas y amantes del segmento.
Mi favorito, en diseño, de esta lista, chulada de auto.
Renault 5 GT Turbo
En los 80 Renault era un sinónimo del turbo gracias a sus desarrollos en la Fórmula 1. Tal fama llegó a algunos modelos de producción, tal cual fue el caso del Renault 5, al que podríamos llamar el padre del Clio. Este pequeño auto adoptó motores con turbo a inicios de los 80, donde tuvo varias versiones con diferentes niveles de potencia que iban desde los 110 hp hasta los 120 hp y una versión de competencia de 140 hp.
Tal cual mencionó, existieron las versiones 5 GT Fase I, 5 GT Fase II, 5 Copa Turbo y 5 Alpine Turbo. Destacaba su manejo más que ágil y explosivo para su época, sin asistencias que controlaran el poder y una aceleración que te dejaba llegar a 100 km/h desde 0 en 7.5 segundos. Fue todo un favorito de los jóvenes y que a nivel diseño llevaba el apellido de Bertone, el mismo carrocero que diseñó el cuerpo del Lamborghini Miura.
La potencia explosiva de este auto, causó que muchos conductores, sobretodo jóvenes sufrieran accidentes, pues el no tener asistencias y poca experiencia en autos más rápidos de lo común, y la adrenalina no se mezclaban bien. A pesar de todo ello, el Renault 5 Turbo sigue siendo uno de los favoritos de antaño.
SEAT Fura Crono (1981-1983) / SEAT IBIZA SXi (1988)
SEAT la marca española no siempre estuvo ligada a Volkswagen, en sus inicios fabricaba autos con licencia de Fiat y de ahí mismo proviene el Fura Crono, un auto basado en el Fiat 127 Sport, pero que nació en el momento en el que ambas marcas separaron sus caminos.
El Seat 127 Fura, (Fiat 127), era un auto con un motor que apenas alcanzaba el litro de cilindrada, en 1981 fue presentado pero sufrió varios cambios estéticos debido a la ruptura entre SEAT y Fiat. La versión Fura Crono estaba basada en el Fiat 127 Sport, solamente que al producirse esta separación, tuvo que modificar varios aspectos visuales con el fin de alejarse del diseño de Fiat. El Fura Crono fue la versión más deportiva de este auto con un motor de 90 hp en su configuración Abarth, logró su cometido de atraer a público joven y hoy es un referente histórico de SEAT y sus autos de mayor rendimiento.
Después del SEAT 127 Fura / Fura Crono, llegó el Fura Dos y después, el primer Ibiza (1984), auto que como pocket rocket sigue emocionando hoy. Digámoslo rápido, porque merecer ser contado. El ibiza nació cuando SEAT pasaba por momentos económicos duros y decidió adoptar un diseño que Giorgietto Giuguaro había hecho como propuesta a Volkswagen para el Golf MKII. Sus primeros motores los suplió Porsche con la leyenda "System Porsche", no eran muy potentes y tampoco eran bóxer, pero Porsche al fin del día. El Ibiza comenzó a fabricarse y a vender a buen ritmo, salvando a SEAT de los problemas financieros. Conforme fue creciendo adoptó nuevas líneas hasta que en 1988 el Ibiza SXi apuntaba directamente a los jóvenes, de ahí parte mucho del appeal en tal segmento de consumidores. Su auge lo vivió en la década siguiente, por lo tanto dejemos este dato hasta aquí.
Suzuki Swift GTI (1986)
¿Qué, un Swift GTI? sí, su primera generación tuvo una versión con las famosas siglas GTI, pues podía poner en apuros a uno que otro hot hatch de la época, contaba con un motor de cuatro cilindros 1.3 litros que desarrollaba 102 hp y 80 lb-pie de torque, todo se acoplaba a una caja manual de cinco cambios. Su 0 a 100 km/h lo lograba en 8.6 segundos gracias a sus escasos 750 kg de peso.
No era el más estilizado, pero en definitiva tenía con que defenderse.
Volkswagen Golf GTI MKII
Sí, el auto que más referencia marca cuando dices las siglas GTI, si bien el MKI sobrevivió hasta 1983-4, la segunda generación vivió su mayor ciclo en los 80, esta versión tomó lo aprendido de su primera generación y lo mejoró en muchos aspectos, comenzando por el crecimiento de tamaño.
Además mejoró su calidad general. El GTI MKII llegó en 1984 con el mismo motor de su predecesor que apenas producía 112 hp. Un año después se presentó con un motor que podía llegar hasta los 139 hp, sin embargo pronto perdió un poco de poder gracias a la llegada del convertidor catalítico que tantas discusiones causó en el mundo motor por aquellos años.
El GTI MKII tenía los toques distintivos que hasta la fecha encontramos en los GTI de VW, una línea roja en la parrilla, los asientos en tela Clark, emblemas GTI, rines de diseño especial, entre otros. Ya para sus últimos años a inicios de los 90, esta generación tuvo las versiones GTI G60 (turbo) y GTI Rallye.
He ahí un vistazo a los GTI que dieron paso a las maravillas que tenemos actualmente. En su momento sin una sola asistencia, un poder que parecía bajo pero con un peso pluma que los hacía volar. Los hot hatch fueron, son y seguirán siendo parte importante del mundo automotriz, no solo por sus capacidades deportivas, sino por el hecho de ser autos que puedes manejar a diario sin tener que gastar excesivamente en ellos.
Si me dieran a elegir un hot hatch de los 80 y uno actual, me decantaría por un Peugeot 205 GTI con motor 1.9. De los modelos recientes el Golf GTI Clubsport, sería mi elegido, aunque si me regalan un Focus RS, no me quejo. ¿Los tuyos cuáles serían?
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