Porsche lo hace de nuevo y gana la edición número 85 de las 24 horas de Le Mans, la máxima carrera de resistencia del mundo en la que por 24 horas continuas se ponen a prueba los autos más sorprendentes, incluso más que los de Fórmula 1 y los del WRC.
Luego de su regreso a Le Mans en el año 2014, la marca Porsche, que en el pasado había forjado un gran legado, ha conquistado de manera contundente la carrera de este año colocando a su auto No. 2 en el primer escalón del podio gracias al manejo de los pilotos Timo Bernhard, Earl Bamber y Brendon Hartley.
La tanda de clasificación previa a la carrera daba un resultado sorprendente ya que Kamui Kobayashi paraba los cronómetros en un tiempo de 3:14.791 con su auto Toyota TS050 No. 7, dos segundos por delante del auto No. 8 también de Toyota dejando en la tercer y cuarta posición a los Porsche.
Trago amargo para Toyota
De los tres autos con los que Toyota participó en las 24 horas de Le Mans, ninguno pudo terminar la carrera. Los problemas empezaron con el auto No. 8 que después de la aparición de humo en el auto, no fue posible repararlo para que regresara a la pista. Después, el auto No. 7 que había arrancado en primera posición y el cual había mantenido gran ritmo de carrera, presentó una falla en el embrague quedándose detenido en la pista. El tercer auto, con el No. 9, tuvo un percance y también quedó detenido.
De esta manera, Toyota, quien el año pasado se quedó a tres minutos de ganar la carrera, no pudo llenar la expectativas que había formado para esta edición 2017 de las 24 horas de Le Mans.
Porsche, haciendo historia con tres triunfos consecutivos
Así, con el camino libre, Porsche no desaprovechó la oportunidad y logró ganar la carrera con su 919 Hybrid No. 2 que luego de visitar los boxes por un problema en uno de los motores eléctricos, salió adelante y recibió la bandera a cuadros. El otro 919 Hybrid no tuvo la misma suerte y abandonó la carrera por un problema de falta de potencia en el auto.
Con este resultado, Porsche suma un total de 19 victorias a lo largo de la historia y la tercera consecutiva luego de su regreso a la contienda en el año 2014. Ganar las 24 horas de Le Mans es un gran logro que año con año los mejores autos buscan alcanzar y que pocos lo consiguen.
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