Una empresa pequeña de motores para aviación —de ahí el emblema con la hélice— que nació hace 103 años pasó a ser una de las marcas automotrices más populares de la actualidad. Por medio de contante trabajo en investigación, innovación y desarrollo de tecnología, BMW es una marca de autos premium que todos conocemos y admiramos por sus balanceados productos que ofrecen un excelente manejo, alta calidad y compiten con los mejores, es cuestión de gustos, pero los bávaros siempre estarán muy arriba en las listas de nuestros favoritos.
El primer récord de BMW llegó a manos de Franz Zeno Diemer, el 17 de junio de 1919, hace 100 años. Pilotó su avión con motor BMW IV (230 hp) hasta una altitud de 9,760 metros sobre el nivel del mar, hazaña que nunca antes se había realizado y menos con la cabina abierta y el aire con poco oxígeno.
Hace 90 años, BMW ya fabricaba motocicletas y decidió dar el siguiente paso, automóviles. El 22 de marzo de 1929, por orden del entonces presidente de la marca, Franz-Josep Popp, se fabricó el primer BMW 3/15 PS. Su producción alcanzó las 16,000 unidades en 1932.
Terminada la Segunda Guerra Mundial, fue momento de retomar la vida y recuperarse de la terrible década que se vivió en Europa. Uno de los primeros pioneros de la movilidad moderna fue Sir Alec Issigonis, que diseñó y llevó a la producción al primer Mini, que se dio a conocer en 1959. Fue el primer auto con motor delantero transversal y tracción delantera, lo cual permitía aprovechar su espacio de manera nunca antes vista. En aquel entonces Mini y BMW poco tenían que ver, sin embargo, hoy son dos marcas asociadas que se benefician una de la otra.
De los microcoches como el Isetta y el 600 y su gran éxito de ventas, derivó el primer sedán compacto de BMW, el 700. Wolfgang Denzel fue quien impulsó este modelo siendo él mismo el que encomendó a Giovanni Michelotti a que lo diseñara. Se presentó en 1959 y para 1965 ya se habían vendido más de 190 mil unidades, con lo cual BMW logró por fin una estabilidad económica, y desde entonces pudo invertir más horas hombre y dinero para investigación y desarrollo.
Las motocicletas BMW 50/5, 60/5 y 75/5 fueron parteaguas para declarar la era moderna de los vehículos de dos ruedas. Gracias a la dirección técnica de Helmut Werner Bönsch, se desarrolló un chasís que aceptaba la horquilla telescópica al frente y suspensión variable atrás. Los clientes pudieron elegir entre una amplia paleta de colores.
El M1 de 470 hp sigue siendo la Ópera Prima de BMW. En 1979 y 1980 se organizó la serie Procar, donde pilotos de autos tipo fórmula y turismos se enfrentaban en el M1 de equitativas características para demostrar quién era el mejor en la realidad, algo así como el Race Of Champions de la actualidad. Esta categoría que inició en Zolder, Bélgica, en 1979 se corrió únicamente en 16 ocasiones.
Si haces bien tus cuentas, hace 20 años se lanzó el primer X5, que a su vez, era el primer todoterreno ofrecido por BMW en su historia. La marca lo denominó SAV o Sports Activity Vehicle en 1999, acrónimo que no se popularizó como ellos lo deseaban. Una versión experimental con motor V12 alcanzó los 309 km/h en Nürburgring. Para 2018, la línea X de BMW representaba casi el 40 por ciento de sus ventas globales, cifra que seguirá en aumento según la tendencia del mercado.
También hace 20 años, en el Salón Internacional del Automóvil de Frankfurt (IAA), el mundo conoció por primera vez el roadster Z8, que se convirtió en uno de los autos deportivos más desados del mundo, tanto que fue un de los coches que manejó el Agente 007 en la película "Agente Bajo Fuego" de 2001. Sus líneas estaban inspiradas en el legendario 507 y se ofrecían motores de hasta 400 hp. Se instaló una línea de producción especial para el Z8 en Munich mientas se fabricó entre 2000 y 2003.