A lo largo de la gama Chevrolet encontraremos bastantes modelos con el apellido RS, pero hasta ahora ningún Malibu lo portaba. A partir del 2019 cambia la historia. La firma estadounidense aprovecha la actualización de su sedán mediano para inyectarle un nuevo paquete deportivo y sumar algunas novedades mecánicas, como una nueva transmisión CVT.
El Chevrolet Malibu RS se colocará entre el LS y LT e incluirá rines de 18 pulgadas, parrilla negra, emblemas oscurecidos, alerón y salida doble de escape; por dentro habrá tapicería en piel, vestiduras negras y el infotenimiento con pantalla de 8 pulgadas con interfaz Chevrolet Infotainment 3, que es de serie en todas las versiones.
Bajo el cofre están disponibles los dos motores turbo de la generación actual, el de 1.5 litros de 160 hp y 184 lb-pie y el de 2.0 litros de 260 hp y 295 lb-pie. En las versiones equipadas con el motor más pequeño, la novedad recae en una nueva transmisión CVT que sustituye a la automática de seis velocidades con el fin de conseguir un mejor rendimiento de combustible. El motor de 2.0 litros conserva su caja automática de nueve velocidades.
Para el exterior y el interior hay una nueva gama de colores. El diseño, al igual que Cruze y Spark, recibe su debida actualización con un frente bajo, rasgos menos cuadrados y una apariencia más agresiva. Faros, fascia, calaveras y parrilla son nuevos y según la versión elegida, puede variar ligeramente su apariencia.