Como has escuchado en los últimos meses, China ha acelerado su participación en la industria automotriz global. Más allá de la expansión de sus marcas y su rol en la cadena de suministros, China se ha convertido en un motor importante para marcas occidentales. El caso más reciente llega de la mano de Jaguar y Land Rover, que emplearán plataformas de Chirey (Chery) para su próxima generación de modelos electrificados.
Yin Tongyao, presidente de Chery, confirmó que Jaguar Land Rover utilizará la tecnología y plataformas de sus vehículos. En concreto, el ejecutivo habla de las arquitecturas modulares M3X y E0X, utilizadas ya en varias marcas del grupo chino, como en Exlantix, Exeed y en los modelos de gama alta de Chery, como el nuevo Tiggo 9.
La plataforma M3X está destinada a vehículos híbridos enchufables y, al menos en el caso de Chery, combina un motor de combustión con dos propulsores eléctricos para alcanzar una autonomía combinada por encima de 1,000 km. La arquitectura E0X, por su parte, es para vehículos eléctricos con un sistema de 800 voltios y fue desarrollada en conjunto con Huawei. Es compatible con tecnología de conducción autónoma y promete un consumo en torno a 12 kWh/100 km.
La colaboración entre la firma británica y Chery data de 2012, cuando firmaron un acuerdo para la producción conjunta de vehículos. Es hasta ahora que Jaguar Land Rover tiene libre acceso a la tecnología de la firma china. Se desconoce por ahora si esos nuevos modelos estarán destinados exclusivamente al mercado chino o si tendrán lugar en el portafolio internacional de Jaguar y de Land Rover.