En la actualidad, la gasolina es un energético preciado, pues a raíz de la liberalización del sector, su costo depende de la demanda; por lo que las innovaciones tecnológicas en el motor de los autos nos permiten extender la autonomía del vehículo y optimizar el rendimiento del combustible (para revisar su precio diario puedes entrar a la página de la Comisión Reguladora de Energía -CRE-).
Ante este panorama, entidades gubernamentales como la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de Energía (Conuee) ofrecen una serie de acciones que se pueden implementar a un estilo de conducción a fin de optimizar el consumo de gasolina cada día.
La eficiencia está en la velocidad: Si bien los fabricantes cada vez hacen más énfasis en la construcción de mejores motores, sacar un mejor provecho para potenciar cada máquina de combustión es trabajo del conductor.
Recordemos que mientras se circula por las calles de la ciudad, la mayoría de los motores encuentran un rendimiento adecuado alrededor de los 60 km/h -una velocidad cercana a los límites en muchas urbes-. Por otro lado, una recomendación de la propia Conuee es no exceder los 110 km/h en carretera, pues podría haber un sobreconsumo de combustible de hasta un 15%.
Mantenimiento y cuidado del motor: Ahora, un motor afinado y con un buen mantenimiento puede ser más eficiente en cuanto al consumo de combustible. La potencia, un rendimiento adecuado y una menor emisión de contaminantes pueden ser una realidad gracias a revisiones mecánicas periódicas.
Por ejemplo, SEAT integró en las diferentes versiones del León 5 puertas motores que la Conuee, considera eficientes y poco contaminantes. En el caso del 1.8 TSI de 180 HP se pueden obtener hasta 19.33 km/l y sólo lanzar al medio ambiente 175 g/km de dióxido de carbono, según las pruebas de laboratorio.
Control de gastos: Un registro presupuestario minucioso te permitirá detectar la más mínima variación de tus egresos; si un factor externo no fue el que detonó el ajuste en el gasto, tendrás un signo claro de una disminución en la eficiencia del vehículo. Así que una revisión mecánica podría no estar de más.
No hay que acelerarse y frenar intempestivamente: Las calles de las diferentes ciudades del país cada vez tienen más autos circulando y ello puede llevarnos a perder la paciencia en algunos momentos, pero siempre hay que recordar que acelerar y frenar de manera intempestiva puede resultar en un mayor consumo de combustible y mayor desgaste del vehículo.
Arranca en frío: Cada que se encienda el motor del auto hay que evitar pisar el acelerador, pues con tal acción el desgaste de la máquina es mayor, se comienza a consumir más combustible del que se necesita y, bueno, ello lleva a una mayor emisión de gases contaminantes a la atmósfera.
¿Qué es lo que hay que hacer? Sencillo, sólo es necesario arrancar el motor y dejarlo funcionar por unos 45 segundos -si le pones atención, sentirás cómo éste simplemente comienza a ronronear de una forma más natural-, luego de esto podrás comenzar a desplazarte sin problema.
Consejo Extra - Aproveche el diseño del vehículo: Los automóviles actuales cuentan con líneas aerodinámicas que permiten reducir la fricción del coche con el aire (a los conductores que salen mucho a carretera les conviene cerrar las ventanas y utilizar la ventilación interior) lo que podría ayudar a reducir hasta 2% el consumo de gasolina.
La Conuee integró varias de las recomendaciones anteriores en lo que denomina ‘Conducción Técnico-Económica’, lo que, según el órgano de gobierno, puede significar en ahorros de hasta un 30% en un presupuesto relacionado con la movilidad.
¿Por qué no crear una estrategia de movilidad?
Cierto, eso crear un plan de conducción parece extraño, pero podría ofrecer distintas ventajas en relación con el consumo eficiente de combustibles, el mantenimiento del vehículo y la reducción de gastos.
Contar con un vehículo que integra innovaciones tecnológicas para ofrecer una mayor eficiencia, además de adoptar una serie de acciones tan básicas como mantener una velocidad ideal sobre las vías previamente elegidas (sí, hay que evitar las paradas continuas), además de un manejo cortés pueden ser sólo el inicio de la estrategia que se necesita para ahorrar combustible.