La increíble historia de cómo Mazda llegó a convertirse en una empresa de 100 años

Hay historias que inspiran. Que nos muestran que el deseo de superación y la búsqueda de la innovación pueden sobreponerse ante cualquier adversidad, no importa si se trata de un devastador incendio o de un incidente atómico. Estos son solo dos eventos a los que Mazda sorteó con entereza y un objetivo claro para cumplir 100 años como una de las marcas automotrices más importantes de la actualidad.

Fue el 30 de enero de 1920 cuando Jujiro Matsuda fundó la compañía. El oriundo de Hiroshima fue el menor de 12 hermanos y comenzó a trabajar como aprendiz en un taller de herrería y fundición en Osaka, Japón, desde los 13 años. Fue entonces que descubrió su pasión por la ingeniería.

Por ello, regresó a su ciudad natal y construyó los cimientos de Mazda, que fueron el resultado de la férrea voluntad de Matsuda por mantenerse a flote ante adversidades tales como el devastador incendio que en 1925 sufrió su compañía, llamada en aquel entonces Toyo Cork Kogyo Co.; o el tristemente célebre incidente atómico de Hiroshima, ocurrido la mañana del 6 de agosto de 1945, justo en la fecha del cumpleaños de Jujiro.

Ahora, el cambio de nombre de la compañía es otra curiosidad de la compañía. ¿Por qué no colocar el apellido Matsuda como marca? Bueno, resulta que ‘Mazda’ proviene del dios de la armonía, inteligencia y sabiduría de las civilizaciones del oeste de Asia que profesaban el Zoroastrismo: Ahura Mazda.

Se reinterpretó el nombre como el comienzo de una nueva cultura automotriz que buscaría contribuir innovar y realizar contribuciones a la industria y al mundo. Y bueno, además, la pronunciación de Mazda es semejante a la de Matzuda.

“Mejorar la calidad de vida de las personas y el desarrollo del país”, fue la motivación principal de Jujiro para centrar los esfuerzos de su compañía en la manufactura de su famoso vehículo de 3 ruedas, llamado Mazda Go, que, aunque debutó desde 1931, en los años posteriores se convirtió en pieza clave para la reconstrucción de la ciudad tras el bombardeo sufrido durante la Segunda Guerra Mundial.

¿Cuál fue la clave del éxito? El vehículo permitió una gran movilidad con un motor de 482 cc y una pequeña batea, que tras el bombardeo a Hiroshima se utilizó para transportar víveres y la herramientas que le permitieron a la ciudad reconstruirse.

Expansión y nuevos retos

Para la década de los 50, Tsuneji Matsuda, hijo y sucesor de Jujiro se convierte en el tercer presidente de la compañía y comienza sus planes de expansión. Lo hace a través del primer automóvil de 4 ruedas, el R360 Coupe, que hizo que Mazda hiciera su entrada triunfal al continente Europeo en 1960.

Éste vehículo y el sedán bautizado como Mazda Carol abrirían por completo la puerta de Europa y Estados Unidos, lo que quedó demostrado cuando llegaron al millón de unidades en 1963.

Fue entonces que la compañía se enfrentó a otro desafío, que, gracias al empeño de sus ingenieros, pudo ser solucionado: hacer funcionar el motor rotatorio, fabricado por Félix Wankel, e implementado por primera vez en el famoso Cosmo Sport 110s. Dicho reto tardó 8 años en superarse, pero finalmente se logró, siendo así pioneros en ese aspecto en el ramo automotriz.

El fruto de esa innovación se vio reflejado con la victoria de las 24 horas de Le Mans en 1991 del Mazda 787B, un vehículo de carreras equipado justamente con un motor rotatorio que tanto esfuerzo costó para implementarse décadas antes.

Visión a futuro: un planeta limpio

Así como históricamente la compañía se ha enfrentado exitosamente a diversos retos, actualmente se ha impuesto el reto de reducir para el 2030, el 50% de las emisiones medias de dióxido de carbono emitidas en 2010; para luego apuntar a una reducción del 90% para el año 2050.

En este sentido, se ha decidido lanzar el Mazda MX-30, su primer vehículo eléctrico, que nace de la filosofía Jinba Ittai: auto y conductor como una misma persona. Así, este vehículo pretende contribuir al cuidado del medio ambiente al tiempo que sigue dando al usuario la emoción de conducirlo.

De esta manera, desde sus inicios hasta ahora, Mazda ha recorrido un camino increíble que le ha permitido consolidarse como una empresa líder en el mundo automotriz. Se ha enfocado en asombrar al mundo con avances tecnológicos dirigidos a eficientar los motores de sus autos, así como mejorar su rendimiento, sin dejar de lado esa constante evolución en el diseño, siendo todos estos elementos factores clave que se han convertido en el sello indiscutible de la marca que ha cumplido ya sus primeros 100 años de vida.

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