Cuando la nueva generación del KIA Forte se estrenó a principios de año, una de las grandes sorpresas fue la ausencia de un motor turbo en su oferta inicial. La marca mencionó estar considerando una variante turbocargada para futuras versiones y, finalmente, no ha tardado en mostrarla al público. Con el KIA Forte GT, los coreanos pisan el acelerador en el mismo camino del Volkswagen Jetta GLI.
En lugar del motor atmosférico de ciclo Atkinson, encontraremos un propulsor turbo de 1.6 litros, capaz de generar 201 hp y 195 lb-pie. A los amantes de los tres pedales les encantará saber que existirá una versión con transmisión manual de seis velocidades, que convivirá en el catálogo con un cambio automático de doble embrague de siete velocidades.
En su apariencia, el KIA Forte GT ha sido bastante discreto. Las preparaciones deportivas se centran en un nuevo diseño de parrilla con el emblema GT, rines de 18 pulgadas, calipers rojos, un alerón discreto y un difusor con dos salidas de escape e insertos rojos. Al interior también hay pocos cambios: pedales de aluminio, asientos deporitvos —también con emblemas GT— y volante con costuras rojas.
Más allá del motor y los accesorios, el chasís del Forte GT recibió modificaciones importantes en favor de una conducción más ágil. Para empezar, se despide de la barra de torsión trasera para abrir paso a una suspensión independiente. La amortiguación es más firme, los frenos delanteros crecen en diámetro y se incorporan barras estabilizadoras. Calza, además, neumáticos Michelin Pilot Sport de verano.
Al ser el nuevo tope de gama dentro de la familia Forte, el GT incluye un equipamiento generoso. Hay faros de LED, iluminación ambiental, llave inteligente, climatizador automático, tapicería en piel, cargador inalámbrico para smartphone, sonido Harman Kardon de 320 watts con ocho bocinas, cuadro de instrumentos con pantalla LCD de 4.2 pulgadas, quemacocos, asientos con calefacción y ventilación, así como un amplio abanico de asistencias de conducción, que van del cada vez más común monitor de punto ciego, hasta alerta de colisión frontal.
Hay, además, una versión GT-Line disfrazada de deportivo
Además de anunciar al Forte GT, la marca presenta el Forte GT-Line, que sigue casi al pie de la letra la receta de accesorios deportivos de su variante auténticamente deportiva. Los cambios cosméticos se centran en insertos rojos a lo largo de distintas piezas de la carrocería, iluminación de LED, carcasas de espejos en acabado negro brillante y accesorios aerodinámicos.
Mecánicamente no hay mayor diferencia respecto al Forte que ya conoces. El GT-Line se queda con el motor atmosférico de ciclo Atkinson de 2.0 litros, capaz de generar 147 hp, disponible con transmisión automática CVT —llamada IVT dentro de KIA.
No se ha confirmado el lanzamiento de ninguna de las dos versiones en México, sin embargo, por el éxito del Forte en nuestro país, es muy probable que al menos la versión deportiva con motor turbo de 1.6 litros sí esté disponible para nuestro mercado en algún momento del próximo año. Los rumores sugieren que, una vez presentada la versión hatchback, sumará esta variante a su oferta.