66 caballos, 3.68 metros de largo y precio por debajo de $200,000. "La SUV de los compactos", como se hace llamar el Renault Kwid, ni es un SUV ni es un compacto, pero sí un urbano que, entendido como tal, puede ser una gran opción para moverse a bajo costo en ciudades tan apretadas como las de México.
No se le pueden pedir peras al olmo ni un alto grado de refinamiento al Renault Kwid, pero sí un diestro equilibrio entre ahorro, seguridad y tecnología en un paquete económico que llega con argumentos sólidos para conquistar a clientes jóvenes. Lo pusimos a prueba.
"Camionetita" sí parece
Todos quieren tener un SUV, por eso no debe sorprenderte que la campaña del Renault Kwid intente convecerte de que se trata de un SUV. Es cierto que esta versión Outsider recibe algunos elementos provenientes de un todoterreno, tales como piezas en plástico sin pintar, rieles portaequipajes —decorativos, porque llevan aviso de no poner carga sobre el techo— y buena altura respecto al piso.
Sus rasgos hacen clic con el resto de la gama Dacia y guiñan un ojo a los modelos europeos de Renault. Sus líneas salieron del mismo lápiz del diseñador de Logan y Sandero, y se refleja principalmente en la forma cuadrada de los faros. En la parte trasera, las calaveras le dan un aire a Captur o Kadjar.
Una cabina sencilla y colorida
La cabina ni decepciona ni sorprende. No se le puede pedir un altísimo nivel de refinamiento a un auto cuya gama inicia en $164,900. Todas las piezas del Kwid son rígidas, brillosas y de apariencia económica; incluso hay algunos tornillos visibles.
Desde el lado amable, cumple con lo esperado de un auto urbano, presenta ensambles sólidos y atiende el gusto de clientes jóvenes. Se nota, además, un esfuerzo por parte de Renault para romper con la simplicidad de un auto urbano a través de la introducción de algunos detalles naranjas en volante, palanca de cambios y puertas. La tapicería es de textura agradable.
El diseño del tablero es sencillo y funcional, aunque la distribución de botones es un tanto extraña. Los controles de los vidrios eléctricos se encuentran abajo de la pantalla táctil y no en los páneles de las puertas, como en la mayoría de los autos. En ese mismo grupo de botones está el control de los seguros eléctricos.
En términos de espacio, hay que ser sinceros: si todo el tiempo vas a viajar con pasajeros en las plazas traseras, cómprate un compacto seminuevo, no un auto urbano. Kwid, como la mayoría de sus competidores, ofrece poco espacio para piernas y acomoda a tres pasajeros atrás muy apretados. El cinturón de seguridad central, además, es sólo pélvico.
El volumen de la cajuela sorprende. De algún modo, Renault consiguió colocar una cajuela de 290 litros en un auto tan pequeño; es la más amplia de su categoría. Sólo puede abrirse desde fuera utilizando la llave, o tirando de una palanca al interior... peligrosamente cerca de la palanca de la tapa de combustible.
El equipamiento correcto para sobresalir
La configuración de equipamiento del Renault Kwid en México me parece sumamente acertada. Desde la versión intermedia contamos con un sistema multimedia de 7" compatible con Android Auto y Apple CarPlay. Por ese precio, un infotenimiento así puede ser un factor decisivo de compra entre consumidores jóvenes. Se suman aire acondicionado, computadora de viaje, algo de equipo eléctrico y... ya. Quizá lo único que extrañamos son espejos eléctricos, controles al volante y una alarma.
Lo más importante en la configuración del Kwid es que todas sus versiones, incluso la más barata, ya cuenta con cuatro bolsas de aire y frenos ABS. Sus competidores suelen incluir sólo dos airbags y eliminar la asistencia en los frenos para versiones base.
Kwid no es lo máximo en seguridad, pero sobresale de entre los urbanos disponibles en México al tener tres estrellas en pruebas de choque de Latin NCAP. Si has visto algún video en que un Kwid se hace pedazos, es porque se trata de la versión fabricada en la India, sin ninguna clase de refuerzo en la estructura. El modelo disponible en México se importa desde Brasil y pesa 100 kg más gracias a todos los refuerzos.
¿66 hp son suficientes para sobrevivir?
El Renault Kwid es uno de los autos menos potentes a la venta en México, pero también de los más ligeros. Utiliza un motor atmosférico de 1.0 litro, capaz de generar tan solo 66 hp y 69 lb-pie. Lo probamos hace unas semanas al nivel del mar con cuatro pasajeros dentro y la respuesta nos pareció correcta; ahora que lo manejamos a la altitud de Ciudad de México reafirmamos nuestra opinión siempre que tu estilo de vida cumpla tres condiciones.
La primera es que rara vez viajes con el auto lleno, porque el motor basta, pero 69 lb-pie no hacen milagros. La segunda es que no vivas en una zona de pendientes prolongadas, porque "escalar" puede costarle trabajo a este propulsor y te obligará a estar jugando con la palanca de cambios. La tercera es que seas prudente al rebasar o incorporarte, sobre todo viniendo de un auto de 100 hp.
Entre semáforos, avenidas, calles y embotellamientos, el Kwid se mueve como pez en el agua. Las dimensiones le ayudan a escabullirse donde otros autos simplemente no caben. La transmisión permite sacarle todo el partido al motor gracias a su escalonamiento: las tres primeras marchas son cortas para arrancar rápido; cuarta y quinta son de descanso.
En el Renault Kwid se puede circular a 50 km/h en quinta a tan solo 2,000 revoluciones, permitiendo obtener un muy buen rendimiento de combustible. En ciudad promediamos 14.4 km/l —el tanque se llena con 37 litros. Incluso a velocidad máxima en vías rápidas, en torno a 80 km/h, el Kwid logra moverse a menos de 3,000 revoluciones.
En términos de conducción, es un auto muy apto para la ciudad. Esos 18 cm libres respecto al piso lo vuelven inmune a topes y baches; la suspensión se siente sólida y la amortiguación consigue un andar cómodo, aunque algo saltón. Kwid ya utiliza la plataforma modular CMF-A de la alianza Renault-Nissan, por lo que en teoría estamos ante un auto de creación reciente, no sobre una arquitectura anticuada.
La dirección eléctrica merece mención honorífica. Es muy ligera y con un extraordinario radio de giro, ideal para entornos urbanos. No se siente poco precisa ni pesada como otros modelos de la marca. Aquí, en todo caso, nos hubiese gustado un tanto un pelín más firme para transmitir mayor precisión en vías rápidas.
Un urbano altamente recomendable
El Renault Kwid está a la venta en México en tres versiones: Intens, Iconic y Outsider, con rango de precios que va de $164,900 a $199,900. Luego de haberlo probado, nos parece la mejor opción del segmento urbano en México... pero no esta versión Outsider que roza los $200,000, sino la intermedia.
Con el Kwid Iconic vas a tener exactamente el mismo nivel de equipamiento y seguridad que en el Outsider, pero pagarás $20,000 que se van en detalles poco relevantes, como la decoración naranja al interior, los tapones embellecidos o los rieles portaequipajes. Conservas los frenos ABS, las cuatro bolsas de aire y el infotenimiento compatible con Android Auto y Apple CarPlay.
A Kwid no le sobra potencia, pero a cambio hay muy buen rendimiento de combustible; no le sobra espacio, pero cabe en cualquier hueco. Es un auto muy bien entendido con la hostilidad de la ciudad. Aquí, en todo caso, por los $200,000 que cuesta el tope de gama, nosotros iríamos por un Chevrolet Spark —igual con cuatro airbags, pero motor más potente y mejor estructura— o un Suzuki Ignis, ambos en versiones básicas.
7.4
A favor
- Muy buen rendimiento de combustible.
- Lleva frenos ABS y cuatro airbags en todas sus versiones.
- Se siente robusto y apto para la hostilidad urbana.
- Hay infotenimiento compatible con Android Auto y Apple CarPlay.
En contra
- Poco espacio interior.
- Potencia justa.
- No incluye alarma.
- El cinturón de seguridad central es sólo pélvico.
Renault Kwid Outsider
$199,900
- Motor: Tres cilindros de 1.0 litro
- Potencia máxima: 66 hp @ 5,500 rpm
- Par máximo: 69 lb-pie @ 4,250 rpm
- Transmisión: Manual de 5 velocidades
- Tracción: Delantera
- Frenos: Disco / Tambor
- Peso: 764 kg
- Velocidad máxima: N.D.
- Aceleración de 0 a 100 km/h: N.D.
- Suspensión delantera: Independiente tipo McPherson
- Suspensión trasera: Eje semirrígido
- Longitud: 3,680 mm
- Cajuela: 290 litros
- Consumo en ciudad: 14.4 km/l
- Consumo en carretera': 26.9 km/l
- Consumo combinado': 20.9 km/l
- Emisiones de CO2: N.D.
- Capacidad del tanque: 37 litros
' Cifras anunciadas por el fabricante