Suzuki, sin ser una marca de gran volumen de ventas, ha conseguido colocar con éxito al S-Cross entre uno de los favoritos del segmento B-SUV. Con esta actualización que va más allá de lo estético, los japoneses ponen en el tablero una ficha que Chevrolet Trax, Nissan Kicks, Honda HR-V y compañía difícilmente podrán derribar. Una ficha que lleva el encanto del apellido turbo.
Antes de seguir, hay que dejar clara una cosa: hace tiempo que el turbo dejó de ser sinónimo de deportivo. Ahora, desde el ahorro de combustible, son cada vez más las marcas que apuestan por este tipo de motores. Introducirlo a su gama de crossovers es todo un acierto por parte de Suzuki, y tras conducir el S-Cross por una semana, te explicamos por qué.
Un Suzuki S-Cross más tosco, más campero
Para empezar, hablemos brevemente de lo que ha cambiado por fuera. Respecto al S-Cross anterior, el frente es el que más ha concentrado los cambios. El nuevo diseño de fascia y calaveras apunta a un espíritu más tosco, más off-road, que va a tono con el linaje de Suzuki en el segmento de los todoterreno. Por la silueta tipo monovolumen y las formas de las calaveras del S-Cross, notamos la inspiración del mercado europeo, pero interpretada al estilo de los japoneses.
Abrimos las puertas —sin necesidad de sacar la llave del pantalón— y encontramos un tablero de diseño minimalista. Lo destacable aquí es la calidad de los acabados, que —afortunadamente— no siguieron los pasos de Vitara, donde son brillosos y duros. No. En S-Cross, la mayoría de las superficies con las que tenemos contacto están fabricadas en plástico agradable al tacto.
Donde no podemos contar la misma historia, es al hablar de la calidad de armado. No es mala, pero el talón de Aquiles de Suzuki siempre han sido los ensambles, y en el caso de nuestro S-Cross —con menos de 2,000 km en el odómetro— ya existían algunos ruidos que acusaban falta de ajuste de algunos componentes del tablero. La cubierta de la cajuela también ocasionaba algunos ruidos incidentales al circular por calles mal pavimentadas.
A priori, todos los mandos parecen estar en el lugar correcto, pero al comenzar a conducir, encontraremos que hay un gran margen de mejora en el cuadro de instrumentos. Si eres de los que constantemente mira el velocímetro para no superar los límites de velocidad, encontrarás que los indicadores no son tan sencillos de leer. Al centro hay una pantalla monocromática, donde bien podría desplegarse un velocímetro digital —como en otros modelos del segmento—, pero únicamente se utiliza para mostrar el consumo instantáneo y promedio, la autonomía y el odómetro.
Extirpemos la CVT, trasplantemos un turbo y hagamos magia con el S-Cross
La mejor parte empieza cuando toca conducir. Si el manejo ya era uno de sus mejores argumentos, sin la transmisión CVT en la ecuación, el resultado es fantástico. En su lugar encontramos una caja automática de seis velocidades, sin modo Sport, pero con modo manual a través de paletas al volante. En todo momento la transmisión busca mantenerse debajo de las 2,000 revoluciones, donde los efectos del turbo aún son muy discretos a cambio de un consumo moderado. En ciudad logramos mantener un rendimiento de 10.9 km/l.
Basta hundir de más el pie para que la transmisión vaya a la zona correcta del tacómetro y haga rendir los 138 hp y 162 lb-pie de torque del motor de 1.4 litros. Los rebases son ágiles y, sin ser propiamente deportivo, el S-Cross se siente ligero. A partir de este año-modelo, la oferta de tracción integral All-Grip quedó fuera de la oferta de S-Cross.
En cuanto a conducción, los componentes mecánicos y electrónicos dan prioridad al confort. La altura respecto al piso y la suavidad de la suspensión se agradecen en zona de baches, donde queda claro que, de contar con los elementos correctos, podría ser un todoterreno, sobre todo por el gran trabajo de amortiguación. En reacciones bruscas, el S-Cross no hace nada extraño y mantiene las llantas bien plantadas sobre el asfalto. De cualquier manera, una suspensión ligeramente más firme podría transmitir mayor confianza, sin necesidad de castigar la comodidad de su andar.
La dirección merece mención aparte. Es rápida y suave, pero a nuestro gusto se siente un tanto sobreasistida. Eso sí, a la hora de estacionarse, es muy fácil maniobrar; se agradecen las dimensiones del vehículo y el radio de giro de la dirección.
Si no es el más vendido, no es por falta de argumentos
A nuestro parecer, tratándose de la versión turbo, el Suzuki S-Cross es la opción más atractiva del segmento. Quizá no sea el más espacioso del segmento, pero hay suficiente lugar para cinco pasajeros —algo apretados— y buen volumen de cajuela. Por una etiqueta de 329,990 pesos, tenemos un equipo de confort y de seguridad muy completo: infotenimiento compatible con CarPlay, sistema de navegación, clima de doble zona, faros de LED, rines de 17”, equipo eléctrico, seis bolsas de aire, llave inteligente, control de velocidad crucero (con función de límite de velocidad), cuatro frenos de disco, ABS con EBD y controles de tracción y de estabilidad.
Extrañamos un quemacocos o techo panorámico y seguros de apertura y cierre automático, pero a lado del balance entre confort, consumo, prestaciones, calidad y equipamiento, nos parece una opción muy racional a lado de su competencia en ese rango de precios: ofrece el mismo equipo, con un motor mucho más alegre.
8.5
A favor
- El motor responde de maravilla.
- Su manejo, de los más cómodos del segmento.
- El rendimiento de combustible es bastante bueno.
- Es de los más completos y balanceados por $330,000.
En contra
- La calidad de armado podría mejorar.
- Tiene LED, pero carece de luces de conducción diurna.
- La pantalla del cuadro de instrumentos se podría aprovechar mejor.
- Hay que cerrar el portón trasero con fuerza para que cierre bien.
Ficha técnica del Suzuki S-Cross Turbo
Versión probada | Turbo | ||
---|---|---|---|
Cilindrada | 1,373 cm³ | Tracción | Delantera |
Motor | 4 cilindros turbo | Capacidad del tanque | 47 litros |
Potencia máxima (hp @ rpm) | 138 hp @ 5,500 rpm | Consumo urbano | 10.9 km/l |
Par máximo (lb-pie @ rpm) | 162 lb-pie @ 1,500 rpm | Consumo en carretera' | 21.7 km/l |
Peso | 1,195 kg | Consumo mixto' | 17.8 km/l |
Velocidad máxima' | 200 km/h | Emisiones de CO2 | N.D. |
Aceleración 0-100 km/h' | 9.5 s | Capacidad de la cajuela | 430 litros |
Transmisión | Automática de 6 vels. | Precio | 329,990 pesos |
' Cifras oficiales del fabricante
Precios del Suzuki S-Cross 2017 en México
- Suzuki S-Cross GL MT ? $269,990
- Suzuki S-Cross GL AT ? $289,990
- Suzuki S-Cross GLX AT ? $314,990
- Suzuki S-Cross Turbo ? $329,990