Toyota Highlander Hybrid, a prueba: el primer SUV híbrido de tres filas en México da en el blanco

No hay categoría a la que Toyota no quiera llevar una opción híbrida. Hoy el turno corresponde a su SUV de tres filas de asientos. El Toyota Highlander 2023 estrena sello Hybrid en México y, de hecho, lo convierte ahora en la única configuración disponible para la gama. Adiós al V6. ¿Qué tan eficiente es? ¿Vale la pena? Lo tuvimos a prueba.

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El Toyota Highlander estrenó esta generación en México en marzo de 2020. Sí, ese marzo. Al final, aun con los retos que trajeron consigo los siguientes años, el Highlander logró convertirse en el modelo más vendido de su categoría. Hoy, con la llegada de esta versión híbrida, se transforma en una opción todavía más interesante. En este tipo de SUV todo es alegría y comodidad, hasta que tienes que pasar a la gasolinera.

El Toyota Highlander 2023 se despide para siempre de los motores de seis cilindros. A partir de ahora sólo está disponible en México con un motor de cuatro cilindros de 2.5 litros, que combinado con propulsión eléctrica es capaz de generar un total de 243 hp. Pero hagamos a un lado las cifras y hablemos de sensaciones.

Lo primero que delata al Highlander como híbrido sucede al oprimir el botón de encendido. No hace ruido. Los híbridos arrancan con el motor eléctrico y siempre buscan aprovecharlo para moverse a baja velocidad. Lo que más trabajo le cuesta —y más energía consume— en cualquier vehículo siempre es arrancar. Por eso los híbridos delegan esa tarea al motor eléctrico.

Highlander no es la excepción. El motor eléctrico opera en solitario al arrancar y su respuesta es instantánea. No te pega al respaldo, pero sí se siente un tanto impetuoso. Si eres sutil con el acelerador y la batería tiene suficiente carga, el motor eléctrico podrá mantenerse operando sin necesidad de encender el de combustión. Ya que entrenas a tu pie derecho, incluso podrías circular a 50 km/h o más usando sólo propulsión eléctrica.

Tarde o temprano entrará en acción el motor de combustión interna. Lo vas a notar al encenderse. Este motor de 2.5 litros es más potente que el eléctrico, por eso es que al más sensible cambio en la presión del acelerador, entrará en acción para ganar velocidad. Lo que me gusta del sistema híbrido es, sobre todo, cómo opera en ciudad. Distingue con bastante destreza los mejores momentos para sólo circular con el motor eléctrico y que el de combustión intervenga únicamente cuando es necesario.

En ciudad está bien; en carretera sólo cumple. Como te dije, el motor eléctrico inyecta agilidad a los arranques, pero conforme vas ganando velocidad, notarás que ese ímpetu inicial se va desvaneciendo y te darás cuenta de que el Highlander Hybrid quizá no es tan rápido como creías. Y ojo, no digo que sea lento o que le falte poder, pero en todos los híbridos hay ese efecto de sentirse más rápidos al arrancar, que a ritmos de carreetra.

Ahí es donde quizá sí se extraña el V6. Y es lógico. El Highlander Hybrid produce 243 hp, el V6 generaba 295 hp. Hay bastante diferencia y se nota sobre todo en carretera. No se siente lento, pero quizá más de uno llegue a extrañar ese punch extra que sí tenía el motor de seis cilindros para casos muy específicos, como cierto tipo de rebases.

En el 80 o 90% de las circunstancias, no llegas a extrañar al V6. Y para ese 10 o 20% de momentos en que sí, recuerda esto: hay una diferencia abismal en el consumo. El Highlander Hybrid promedió 11.7 km/l en ciudad. Cuando probamos el V6, hace ya 3 años, el consumo fue de 5.1 km/l. El híbrido pierde una rayita de poder, pero gana cinco en eficiencia.

¿Qué tal está el equipamiento?

El Toyota Highlander Hybrid 2023 trae tres versiones para México: LE, XLE y Limited. Desde la más accesible, el equipamiento ya incluye freno de estacionamiento por botón, llave inteligente, faros de LED, asiento del conductor con ajuste eléctrico, pantalla de 8” con Android Auto y Apple CarPlay inalámbricos, cámara de reversa y climatización automática independiente para tres zonas.

Conforme escalas en la gama se pueden sumar volante calefactable, techo panorámico, una nueva pantalla de 12.3”, sistema de sonido JBL de 11 bocinas, cargador inalámbrico, espejo electrocrómico, asientos delanteros con calefacción y ventilación, entre otros.

Algo destacable es que todas las versiones incluyen la suite de asistentes avanzados de manejo Toyota Safety Sense 2.5. Lleva freno autónomo de emergencia con detección de peatones, luces altas automáticas, control crucero adaptativo, asistente de mantenimiento de carril con seguimiento de líneas y ocho bolsas de aire. Desde la intermedia además suma monitor de punto ciego y alerta de tráfico cruzado trasero.

Ahora bien, hablemos de practicidad y calidad. El tablero tiene un diseño funcional; es fácil leer los instrumentos, las pantallas y colocar objetos. Los materiales a bordo cumplen con lo esperado en la categoría. No me parece la selección de materiales más sofisticada en la categoría, pero tampoco encuentro alguna pieza incongruente con el tipo de vehículo o con el precio. Es correcto.

Ahora, en espacio, es importante mencionar que todas las versiones tienen tres filas de asientos, pero sólo en las versiones LE y XLE hay capacidad para ocho pasajeros; en la tope de gama es para siete porque la segunda fila lleva asientos tipo capitán. Individuales.

El espacio en la segunda fila es el mejor, pero en tercera fila, como es habitual en este tipo de SUV, es un tanto limitada. Personas muy altas podrían sufrir para acomodarse en viajes largos. La ventaja en la versión tope de gama es que no hay asiento en medio en la segunda fila, lo que permite estirar un poco mejor las piernas. Además los asientos se pueden reclinar para encontrar una posición ideal para viajes largos.

La cajuela es algo importante a mencionar. Sí, se reduce bastante cuando la tercera fila está en su sitio, pero aun así tiene buen volumen de carga para lo que se espera en la categoría. Son 453 litros, más o menos lo que un Corolla.

El precio mantiene los pies en la tierra

El Toyota Highlander Hybrid 2023 ya está en México y tiene algo especial: es el único SUV de tres filas de asientos con propulsión híbrida. Ni Mazda CX-9 ni Volkswagen Teramont ni Honda Pilot ofrecen algo así. Y para la gasolina que gastan los SUV de este tamaño, es algo que muchos clientes van a valorar mucho y que seguramente reafirmará la posición de Highlander como el modelo más vendido en la categoría. Sus precios en México van de 835,900 a 960,900 pesos.

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