Toyota Tacoma 2020, a prueba: una pick-up de doble propósito, ahora 100% hecha en México

La Toyota Tacoma es una pick-up que ya conocemos muy bien. Su modelo 2020 recibe una serie de actualizaciones menores, donde lo más relevante en realidad es su origen: estrena la nueva fábrica de Toyota en Guanajuato y traslada el 100% de su producción a México, dejando espacio en las instalaciones de Texas para enfocarse en Sequoia.

Toyota se ha ganado muy buena reputación en la categoría de vehículos comerciales, aunque yo no encasillaría a Tacoma en esa categoría. Es cierto que resulta útil para un negocio, pero su talento trasciende a lo recreacional gracias a su capacidad todoterreno y a una gama de colores llamativa.

La Tacoma que llegó a nuestro garaje va pintada en un color azul exclusivo de la versión Edición Especial 4x4. Los cambios en su apariencia son muy discretos. Muy. Hay que comparar fotos y leer especificaciones para darse cuenta del cambio en la trama de la parrilla, los retoques en fascia y las novedades en calaveras.

Interiores pensados en el trabajo rudo

La atmósfera en la cabina de la Toyota Tacoma 2020 es la clásica en una pick-up mediana: la posición de manejo es altísima y la selección de materiales apunta más a soportar malos tratos, que a brillar por su refinamiento.

Casi todos los plásticos al interior de Tacoma son rígidos, lo que resulta conveniente si pensamos en durabilidad y facilidad de limpieza. Incluso zonas del tablero o de los paneles de las puertas, donde usualmente hay tela o piel, fueron reemplazadas por una clase de hule. No me encanta su apariencia, pero tiene mucho sentido si pensamos que el hábitat natural de Tacoma es entre lodazales y pasto.

Al ser una pick-up de doble propósito —trabajo y uso personal—, la única configuración disponible es de doble cabina. Hay cinco plazas, con espacio abundante en la primera fila y sólo suficiente en la banca trasera. Atrás se acomodan bien tres pasajeros a lo ancho, aunque el espacio para piernas es algo limitado.

Más equipado que un vehículo meramente comercial

No, la Toyota Tacoma no es precisamente un vehículo para flotillas. Hay versiones accesibles, sí, pero incluso desde la versión más accesible hay un alto grado de equipamiento, demostrando que Toyota va a la caza de clientes particulares en busca de un vehículo práctico, con capacidad todoterreno y que no escatime en amenidades.

En el tope de gama, que fue el que probamos, tendremos tapicería en piel, quemacocos, asiento del conductor con ajuste eléctrico, climatizador automático bizona, llave inteligente, espejo retrovisor electrocromático, navegación, asientos delanteros con calefacción, cargador inalámbrico para teléfonos y un sistema de infotenimiento con pantalla de 8", ligeramente más grande que el modelo anterior. Es compatible con Android Auto y Apple CarPlay.

El nivel de equipamiento me parece completo, aunque no exento de ausencias. A decir verdad, por 766,600 pesos, se echan de menos faros de LED —sólo monta halógenos de proyección—, monitor de punto ciego o unos sensores de proximidad delanteros; hay cámara de reversa, pero unos sensores ayudarían mucho a maniobrar en espacios reducidos.

Un manejo con mucho sabor a todoterreno

Al volante, la Toyota Tacoma se comporta como un todoterreno. La suspensión es saltona, como suele ser habitual en este tipo de vehículos, pero sin llegar a incomodar. Se agradece que, dentro de su enfoque off-road, Toyota lograra que la Tacoma no rebotara tras pasar topes o baches profundos.

No es un vehículo para ir rápido, desde su altura respecto al piso, hasta el peso que marca en báscula, que no es poco. Lo que me parece positivo es lo fácil que le resulta moverse en ciudad, gracias a una dirección relativamente suave y capaz de comunicar lo suficiente para entender qué sucede en el eje delantero.

La fuente de poder es un V6 de 3.5 litros, capaz de generar 278 hp y 265 lb-pie. Los arranques no se sienten precisamente rápidos, pero sí bien cargados de energía. Al final, siendo un vehículo pensado para trasladar carga y librarse de obstáculos fuera del asfalto, un motor rico en torque es más importante que uno potente. Se controla a través de una caja automática de seis cambios.

Su capacidad todoterreno queda definida por un sistema de tracción integral conectable, que además incluye caja reductora. Se suman neumáticos de perfil alto, 23.9 cm libres respecto al piso, y ángulos de entrada y salida de 29º y 23.1º respectivamente.

Una pick-up de doble propósito

La Toyota Tacoma es un vehículo pensado para quienes necesiten trasladar carga, sea por negocio o por motivos personales, pero que no quieran centrarse sólo en un vehículo comercial. Desde su capacidad todoterreno, hasta el alto nivel de equipamiento, la pick-up japonesa busca su lugar en el mismo campo que Ford Ranger o Volkswagen Amarok.

La Toyota Tacoma 2020 ya está disponible en México. Su rango de precios va de 626,900 pesos para la versión de tracción trasera, hasta 766,000 pesos de esta versión, tope de gama, llamada Edición Especial 4x4.