La parte menos divertida de tener un auto es tener que llevarlo a reparaciones y mantenimiento. Tesla quiere cambiar las cosas con un servicio al cliente mediante el cual rara vez tengas que pasarte por uno de sus talleres. La propuesta es así: bastará una conexión WiFi para realizar actualizaciones importantes y, en el 90% de los casos, detectar aquello que no va bien.
Según Tesla, para el 80% de las reparaciones no es necesario visitar el taller. Por lo tanto, ofrece un servicio de técnicos móviles que pueden ir hacia donde estés y saber con anticipación qué es lo que el auto necesita, gracias a su conexión a internet. Recientemente adquirieron más de 350 unidades de asistencia en su flotilla y ya cubren el 40% del territorio Norteamericano.
En caso de que sea necesario visitar el taller, Tesla menciona que es probable que el servicio concluya antes de que termines tu café, pues su flujo de reparación es cuatro veces más rápido y ocupa tres veces menos espacio que un taller mecánico convencional. La marca acaba de inaugurar 100 centros de servicio en todo el mundo.
Todo apunta a que Tesla se está preparando para la llegada de nuevos clientes, con sus respectivas necesidades. El lanzamiento del Model 3 supone un crecimiento importante para la marca en el porcentaje de participación de mercado de los vehículos eléctricos. La satisfacción al cliente, más allá del producto, es crucial para lograr sus objetivos.