En una época en la cual las armadoras se esmeran por crear y comercializar autos que ofrezcan potencia con muy pocas emisiones o bien autos eléctricos o híbridos enchufables todavía hay modelos que desafían esta regla y se venden como los bolillos en la cena de Navidad.
¡Vaya! Ni al Dodge Charger SRT Hellcat ni a su hermano el Challenger les importan los temas ambientales. Bien parecería que la baja en el precio de la gasolina en el vecino país del norte ha venido a ayudar a que la demanda por estos bólidos Made in Detroit crezca más allá del control de la compañía.
Fue a mediados del año pasado cuando Dodge lanzó a la venta dos versiones sobredimensionadas de sus autos y les brindó un apellido que no podía ser más idóneo: Hellcat, cuyo corazón es un motor V8 6.2 l sobrealimentado que genera 717 hp.
Y de pronto la demanda comenzó a crecer como la leche cuando la ponemos a calentar en la estufa. Y es que Dodge pronosticaba ventas de 4,600 unidades al año, mientras que los 2,300 concesionarios de Estados Unidos tenían en mente vender una unidad al mes.
Durante los primeros meses de ventas del Hellcat la demanda subió hasta las 9,000 unidades, de los cuales apenas se han entregado 2,000. Es por ello que Dodge decidió detener su comercialización hasta que puedan adaptar su línea de producción y sistema de ventas para producir más coches.
Sobre el tema, el portavoz de la empresa declaró:
Debido a la demanda sin prcedentes para el Dodge Charger 2015 y el Dodge Challenger SRT Hellcat , estemos deteniendo temporalmente las nuevas órdenes de compra mientras validamos pedidos actuales que ya están registrados en el sistema.
La conclusión a esta nota no podría ser más clara: si quieres un Charger 2015 o un Challenger SRT Hellcat 2015 tendrás que esperar un tiempecito más.
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