Chery Auto, marca conocida en nuestro país como Chirey, quiere comenzar a ensamblar modelos en Europa, y tiene la mira puesta en aprovechar una planta de producción en Barcelona, que Nissan cerró en 2021.
En sus 38 años de operaciones, la planta de Nissan en la Zona Franca de Barcelona, con una superficie de 517, 000 m2, HA marcado numerosos logros. Desde que Nissan fabricó en la planta su primer vehículo en Europa, el Nissan Patrol, la compañía produjo más de 3,345,000 unidades y 15 modelos diferentes en Barcelona.
Desde que la firma japonesa cerró este complejo industrial, el fabricante local de motocicletas eléctricas Silence ha estado operando en este sitio, así como los grupos de ingeniería QEV y EV Motors. Tal Y como están las cosas, EV Motors tiene el control corporativo total de este lugar y ha estado en conversaciones con Chery.
De llegar a un acuerdo, EV Motors continuaría operando fuera de la fábrica y podría firmar acuerdos comerciales y de producción con Chery, para producir sus camionetas eléctricas de la marca Ebro.
De hecho, el gobierno regional de Cataluña enviará funcionarios empresariales a China para hablar con ejecutivos de Chery. Aún no está claro si el gobierno español ofrecerá alguna ayuda pública a Chery, pero abrirá dos licitaciones este año, invitando a las empresas a solicitar un total de 1,800 millones de dólares en préstamos y subvenciones para la producción de vehículos eléctricos.
De momento no hay información que de a conocer los modelos que la firma china pretende fabricar en Europa ni cuántas unidades espera producir anualmente. De acuerdo con Automotive News Europe, Chery permanece en contacto con las autoridades de Italia, posible país donde también existía la posibilidad de poner una planta de producción, ha recibido poca respuesta y ahora parece favorecer a España.