¿Fibra de carbono, aleación de aluminio, fibra de vidrio? Ninguno, los ingenieros de Icona decidieron darle una carrocería de titanio a su Vulcano, convirtiéndolo en el primer auto en utilizar una carrocería de este material. Pero esto no es nada nuevo, el Vulcano fue presentado por primera vez en el Auto Show de Shanghái en 2013 y cuatro años después el fabricante italiano llevó la versión final al evento este año, con un precio descomunal para el territorio chino.
El Vulcano utiliza un chasis diseñado por el ex director de Ferrari, Claudio Lombardi y tanto su aspecto como los materiales utilizados nos dejan saber qué tipo de deportivo es. Utiliza un motor V8 6.2 litros de origen General Motors con el que puede entregar 670 caballos de fuerza. Si estos números les parecen familiares es porque proviene de un Corvette Z06. La marca asegura que puede llegar a más de mil caballos, pero eso también aumentará el precio.
En el mercado europeo uno puede comprarse un Icona Vulcano por cerca de 3 millones de euros. Una cifra alta incluso para los super deportivos de nicho, pero entendemos que utiliza materiales únicos y ese tipo de cosas. Sin embargo, en China el precio aumenta un poquito más. Debido a los impuestos que el gobierno impone a los vehículos importados, el Vulcano debe pagar 170% extra sobre su precio local, lo que eleva la cantidad a los 68 millones de yuanes, o lo que es lo mismo, 10 millones de dólares.
Esto probablemente lo convierta en el auto de producción más caro del mundo. Evidentemente su fabricación es de manera artesanal y toma alrededor de 10 mil horas terminar una sola unidad, pero 10 millones de dólares por un auto de una marca que prácticamente nadie conoce es un poco excesivo, incluso para los multimillonarios chinos que suelen se algo excéntricos.
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