Un buen número de actores del segmento compacto atraviesa un profundo proceso de renovación a nivel internacional. Tres sedanes relevantes para México estrenaron generación en los últimos meses y ya se encuentran disponibles como modelo 2019: Volkswagen Jetta, KIA Forte y Mazda 3. El próximo año, además, se unirán los nuevos Toyota Corolla y Nissan Sentra.
Ante esta evolución del segmento, y por lo mucho que se ha hablado del nuevo Mazda 3 estos días, hemos decidido analizar sus tres versiones disponibles para México y compararlas contra sus equivalentes en la gama de KIA Forte y Volkswagen Jetta, para descubrir cuál conviene comprar —y por qué— según sus distintos rangos de precios.
Hablemos de motores
Antes de caer en diferencias de equipamiento entre versiones, hablemos de sus constantes: la oferta mecánica. Todas las versiones de los tres modelos utilizan un solo motor para toda la gama. El más modesto es el de 2.0 litros del KIA Forte, capaz de generar 147 hp y 132 lb-pie. Por su ciclo Atkison y la transmisión CVT, queda claro que ahorrar combustible le resulta más importante que romper récords de aceleración o de ofrecer sensaciones de manejo emocionantes. Es un sedán cómodo y estable, aunque dista de ser la primera opción de quien busca un compacto divertido.
El Volkswagen Jetta ofrece el propulsor más interesante: un motor turbo de 1.4 litros de 150 hp y 184 lb-pie. Su par es casi idéntico al de Mazda 3, y aunque su potencia es considerablemente menor, el turbocargador lo vuelve inmune a la pérdida de poder por la altitud: una ventaja importante si hablamos de ciudades como las de México. El único pero del Jetta, dinámicamente hablando, lo escribe su transmisión automática, incapaz de ocultar el retraso en la entrada del turbo. Dicho de otro modo, se siente algo torpe en arranques y luego entrega todo su poder de manera abrupta.
El Mazda 3 2019 se coloca en el punto medio de prestaciones. Su aceleración es más contundente que la de Forte y más lineal que la de Jetta. Genera 186 hp y 186 lb-pie. Si tomamos como referencia a su generación anterior, al volante debe ser un compacto mucho más directo y equilibrado entre confort y dinamismo. Su desventaja llega al hablar de consumos. La marca homologa 15.3 km/l en ciclo combinado, mientras Forte y Jetta se apuntan 18.5 km/l y 18.6 km/l respectivamente, con transmisión automática.
En acabados, Mazda sigue siendo referencia
Uno de los puntos fuertes de cualquier Mazda son los acabados al interior. El Mazda 3, en concreto, da un salto importante en materia de calidad. Sin pertenecer a una categoría de lujo, el compacto japonés quiere traer a sus clientes algunos atributos del segmento premium. Su cabina juega con una acertada combinación de colores y texturas para crear una atmósfera sofisticada y poco habitual en su categoría. Es, sin pensarlo dos veces, el compacto mejor terminado.
El habitáculo del Volkswagen Jetta también ofrece un buen nivel de calidad. Su combinación de materiales es menos ostentosa que la de Mazda, aunque también recurre a una buena cantidad de superficies gomosas y piezas en acabado negro brillante. Hay algunas zonas rígidas en la consola central, pero en general, la percepción de calidad al interior es buena; la pantalla táctil de 8 pulgadas —a partir de la versión R-Line— contribuye a la sensación de "coche caro".
El más modesto es, nuevamente, el KIA Forte. Sus acabados son correctos para el segmento al que pertenece, aunque no sobresale. Comparado con lo que encontramos en la cabina de Jetta o Mazda 3, hay una menor cantidad de superficies acolchadas. Algunas piezas en negro laqueado y aluminio cepillado-ish embellecen detalles del tablero.
Hablemos ahora de las diferencias entre versión. ¿Qué modelo es más competitivo a la hora de brincar entre distintos presupuestos?
Así va el Mazda 3 básico contra sus rivales
KIA Forte EX | Mazda 3 Sedán i | Volkswagen Jetta Trendline | |
---|---|---|---|
Precio | $334,900 | $339,900 | $331,990 |
Rines de aluminio | Sí (16") | Sí (16") | No (16") |
Faros de LED | No | Sí | Sí |
Calaveras de LED | No | Sí | Sí |
Sensor de luz | Sí | No | Sí |
Aire acondicionado | Sí | Sí | Sí |
Pantalla táctil | 8 pulgadas | 8 pulgadas | 6.5 pulgadas |
Apple CarPlay y Android Auto | Sí | Sí | Sí |
Control de velocidad crucero | Sí | Sí | Sí |
Freno de estacionamiento eléctrico | No | Sí | Sí |
Espejos abatibles eléctricamente | Sí | No | No |
Volante forrado en piel | Sí | Sí | No |
Descansabrazos central trasero | Sí | No | No |
Sensor de reversa | Sí | Sí | Sí |
Cámara de reversa | Sí | No | No |
Salidas de aire acondicionado traseras | Sí | No | No |
Cajuela de apertura manos libres | Sí | No | No |
Puerto USB adicional | Sí | Sí | No |
Llave inteligente | Sí | No | No |
Cuando se trata de equipamiento, el KIA Forte es el más afortunado. El ahorro en motores y acabados le permite ofrecer una dotación más generosa de elementos de confort, sobre todo los de alta funcionalidad, como llave inteligente, cámara de visión trasera, cajuela de apertura manos libres y salidas de aire acondicionado para la segunda fila. En el polo opuesto, no lleva freno de estacionamiento eléctrico ni faros de LED.
El Volkswagen Jetta Trendline es el menos equipado. Ofrece todos los elementos de seguridad importantes, pero pierde mucho en materia de confort y tecnología: su pantalla táctil es más pequeña, no lleva rines de aluminio, el volante no está forrado en piel y el sistema de sonido sólo es de cuatro bocinas.
El Mazda 3 Sedán i es el más equilibrado. No está tan equipado como Forte ni tan austero como Volkswagen Jetta, pero ofrece suficientes elementos de confort y tecnología, combinados con prestaciones de buen nivel. ¿Qué se echa de menos? Un descansabrazos central trasero, ventilación para la segunda fila y una llave inteligente para desbloquear las puertas —no sólo para encender el motor.
Hablemos de intermedios: ¿Quién da más por 360,000 pesos?
KIA Forte EX Premium | Mazda 3 i Sport | Volkswagen Jetta Comfortline | |
---|---|---|---|
Precio | $362,900 | $359,900 | $356,990 |
Quemacocos | Sí | Sí | No |
Ajuste eléctrico para asiento del conductor | Sí | Sí | No |
Asiento del conductor con memoria | No | Sí | No |
Tapicería en piel | Sí | No | No |
Espejo retrovisor electrocromático | Sí | Sí | No |
Espejos laterales con memoria | No | Sí | No |
Climatizador automático bizona | Sí | Sí | No |
Monitor de punto ciego | Sí | No | No |
Alerta de tráfico cruzado | Sí | No | No |
Cargador inalámbrico | Sí | No | No |
Sensor de lluvia | Sí | Sí | No |
Llave inteligente | Sí | Sí | No |
Cámara de reversa | Sí | No | No |
Sensor de reversa | Sí | Sí | No |
Nuevamente, el KIA Forte se impone cuando hablamos de equipamiento. Un punto importante a destacar es que las versiones intermedias de Jetta y Mazda 3 están al precio de la versión más equipada del compacto coreano. Así, el Forte goza de elementos tecnológicos importantes, como monitor de punto ciego, alerta de tráfico cruzado y cargador inalámbrico para smartphones.
Dentro de la gama del Mazda 3, la versión i Sport es la mejor balanceada. Aunque su carga tecnológica no es tan completa como la de Forte, su nivel de confort es bastante parecido: hay espejo retrovisor electrocromático, algunos ajustes eléctricos con memorias, llave inteligente, quemacocos y sensor de lluvia. Lo único importante que queda a deber es una cámara de reversa y, nuevamente, salidas de aire acondicionado para los asientos traseros.
El Volkswagen Jetta Comfortline sigue sin brillar por equipamiento. Con una etiqueta de 356,000 pesos, nos extraña que no haya climatizador automático, sensores de proximidad, llave inteligente, quemacocos, cámara de reversa o espejo retrovisor electrocromático. Sus versiones mejor dotadas son considerablemente más costosas que sus rivales.
El Mazda 3 más equipado ofrece buena relación valor/precio
Mazda 3 i Grand Touring | Volkswagen Jetta R-Line | |
---|---|---|
Precio | $399,900 | $403,990 |
Sensor de lluvia | Sí | No |
Quemacocos | Sí | Sí |
Espejos laterales con memoria | Sí | No |
Climatizador automático bizona | Sí | Sí |
Llave inteligente | Sí | Sí |
Asiento del conductor con ajuste eléctrico | Sí | No |
Memoria para el asiento del conductor | Sí | No |
Sistema de sonido Bose de 12 bocinas | Sí | No |
Head-up display | Sí | No |
Paletas de cambio al volate | Sí | No |
Cámara de reversa | Sí | No |
Monitor de punto ciego | Sí | No |
Bloqueo electrónico de diferencial deportivo | No | Sí |
Pagar 400,000 pesos por un compacto empieza a sonar a capricho, y en realidad lo es. En su versión más equipada, el Mazda 3 suma elementos tecnológicos de alto nivel, que dejan atrás el enfoque utilitario de un compacto y lo acercan a esta filosofía de lujo que la firma japonesa ha querido crear en torno a sus lanzamientos más recientes.
La versión i Grand Touring incluye sistema de sonido Bose de 12 bocinas, un completo head-up display —único en el segmento—, tapicería en piel, monitor de punto ciego, faros con alumbrado en curva y paletas de cambio al volante. Curiosamente, Mazda reserva para esta versión elementos que deberían estar presentes en el resto de la gama, como la cámara de visión trasera. Y aun en este tope de gama, nos sigue faltando un cargador inalámbrico para smartphones.
El Volkswagen Jetta equivalente no es el más equipado, sino la versión R-Line de apariencia deportiva. Su equipamiento ya es más completo, con elementos como infotenimiento con pantalla de 8 pulgadas, un quemacocos bastante grande, tapicería en piel, climatizador automático bizona y llave inteligente, sin embargo, aún queda a deber frente a la oferta de Mazda 3.
Tres compactos de enfoque muy distinto
A pesar de moverse en un rango de precios tan similar, la oferta de Volkswagen Jetta, KIA Forte y Mazda 3 Sedán es muy distinta. El compacto coreano es de más bajo perfil, lo que le permite ganar mucho equipamiento de confort y tecnología sin inflar demasiado el precio en todas sus versiones, aunque a costa de acabados más sencillos y un motor menos explosivo. Es la compra que obedece más a la razón que al corazón.
El Volkswagen Jetta hace lo opuesto: apela antes al corazón que a la razón. Y por corazón, esta vez me refiero a la nostalgia. Con un motor turbo y un nombre que causó furor en sus años de gloria, el compacto alemán no es precisamente el más equipado ni el que ofrece la mejor relación valor-precio, pero su propulsor quiere conquistar a los fanáticos de la palabra turbo. Dista de ser la compra sensata, pero cumple el deseo de quienes siempre soñaron tener un Jetta.
El Mazda 3 no alcanza el equipamiento de sus versiones equivalentes en la gama del Forte ni resulta tan explosivo como el Jetta, pero ofrece un mayor grado de refinamiento y —salvo la versión de acceso a la gama— un buen equilibrio entre prestaciones, calidad, equipamiento, tecnología y diseño. El tope de gama trae al segmento compacto elementos heredados de una categoría superior sin cruzar la barrera de 400,000 pesos.