Si bien no es ninguna novedad que veamos hoy en día autos clásicos eléctricos, sí que lo es cuando se trata de una creación desde cero y no una adaptación. En este caso nos referimos al último lanzamiento de ORA, la firma china filial de Great Wall Motors, quienes presentaron un concepto un tanto curioso.
Antes de entrar a los detalles, seguramente al ver el diseño del ORA Futurist vino a tu mente el gran parecido que tiene con la leyenda Ford Mustang, y sí…nosotros pensamos lo mismo.
Este contendiente chino fue presentado en el Salón del Automóvil de Pekín 2020, y se trata de un sedán que porta un propulsor eléctrico combinado con un estilo clásico.
Rompiendo un poco la línea que nos mostró ORA con el R1 o con el Good Cat, vamos a encontrar en este concepto un modelo a decir verdad atractivo a simple vista, con ese juego de faros afilados que enmarcan perfecto a esa parrilla simulada.
Si nos ponemos un poco detallistas, incluso se llega a parecer al nuevo Mustang Mach-E, sobre todo en la parte frontal y en el cofre, donde en una primera impresión parece que estamos ante un SUV, pero ya si lo vemos en los costados o en la parte trasera, esa ilusión desaparece.
Otro detalle que nos recuerda a un Mustang clásico es la barra en plata que recorre todo el frente de manera horizontal, muy parecido a lo que tenía de primera generación en los años 60, al igual que los pequeños faros diurnos circulares.
El diseño de la carrocería es especial, pues las puertas son estilo suicida, y carece del pilar B, lo que hace que se genere una sensación de mayor amplitud en el interior.
Hablando de los detalles que encontramos en la cabina, incorpora una mezcla de materiales, desde cromo, piel, alcántara, hasta un material tipo cristal en el cuadro de instrumentos y en la consola central.
Pese a lo anterior, el estilo sigue siendo el de un clásico, pues el volante es delgado de tres brazos, una palanca detrás del mismo, y un cuadro de instrumentos en forma circular aunque ya digital.
En cuanto a sus atributos eléctricos, cuenta con baterías sin cobalto que le permiten alcanzar hasta una autonomía de 700 kilómetros con una sola carga, una cifra sorprendente para un auto de producción, aunque no para un concepto.
ORA Futurist se creó tomando como base la plataforma Lemon de Great Wall Motors, que puede soportar vehículos de todo tipo, desde autos a gasolina, híbridos y eléctricos, hasta de hidrógeno.
Aun se desconoce si el auto dará el gran salto a la producción, sin embargo, habrá que estar muy pendientes de ello, pues seguramente los amantes del deportivo americano podrían no estar muy de acuerdo.