De acuerdo a un reporte dado a conocer el periódico El Universal y AMDA, las leyes para detectar y frenar el lavado de dinero en nuestro país han provocado una desaceleración en el mercado de autos de lujo, debido a que el consumidor no puede pagar con efectivo, sino vía electrónica, y además se rehúsa a ser reportado ante la Secretaría de Hacienda.
De esta forma, la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), comentó que representantes del sector que reporta mayor afectación, propondrá un cambio legal para eliminar restricciones al manejo de efectivo.
De acuerdo con la ley, las empresas y particulares que se dediquen a cualquiera de las 17 actividades vulnerables (entre ellas, venta de vehículos, obras de arte y juegos con apuestas, etc) deben abrir expedientes a una parte de los clientes y, eventualmente, reportarlos a Hacienda. Pero no te asustes, estos reportes se generan cuando los consumidores exceden los límites que marca la nueva normatividad.
De esta forma, los empresarios tienen que dar aviso cuando se realiza una compra-venta considerada "de riesgo" e incluso enviar "informe en ceros" si durante el mes no se registró ninguna operación sospechosa.
Estas nuevas reglas generaron que del 1 de septiembre de 2013 al 24 de febrero de 2014 la iniciativa privada generara 953 mil 82 avisos e informes en ceros. El rubro que más reportes envió es el de Vehículos Aéreos, Marítimos o Terrestres, con 612 mil 327.
Sobre el tema, el director general adjunto de la AMDA, Guillermo Rosales, afirmó que el sector ha sido el más afectado, por lo que propondrá conservar la obligación de informar a Hacienda, pero "que no haya restricción en el manejo de efectivo".
Cabe aclarar que esta nueva ley ha provocado que los interesados adquieran a particulares un vehículo seminuevo, cuya transacción se realiza en efectivo sin ningún problema.
A una señora no le quisieron vender una camioneta porque pagaba en efectivo
Uno de los casos más recientes tuvo lugar en febrero pasado cuando Perla, una señora de 50 años de edad llegó a una agencia de autos de la ciudad de México, de la cual ya era cliente frecuente.
Intentó adquirir una camioneta que ya había elegido en color, marca y modelo. Incluso traía los fajos de efectivo en la mano, como siempre lo había hecho, sin embargo en esa ocasión las cosas no resultaron como ella deseaba.
La nueva Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita, mejor conocida como “ley antilavado”, le impidió concretar la compra porque quiso pagar en efectivo un vehículo de más de 216 mil pesos más IVA, cuando ella estaba obligada a realizar una operación bancaria.
Asimismo, la señora tampoco estuvo de acuerdo en entregar sus datos de identificación a la agencia para que ésta los remitiera a la Secretaría de Hacienda, como lo marca la nueva disposición.
Un representante de la mencionada agencia comentó al respecto:
Ha habido gente que, si sabe que se le va a reportar a Hacienda, dice: ‘mejor ya no compro’. Hace un par de meses una dama llegó a comprar un vehículo y éste tenía un costo de entre 280 y 290 mil pesos, pero traía el dinero en efectivo y le dijimos: ‘Nos da mucha pena pero no podemos recibirle dinero’, y respondió molesta: ‘¿qué, mi dinero no vale?’.
La agencia y Alan perdieron esa venta. La señora, de la que nunca se supo a qué se dedicaba, prefirió no adquirir la unidad a ser fichada por el sistema bancario y la Secretaría de Hacienda.
Guillermo Rosales comentó:
El limitante del efectivo ha provocado que los clientes dejen de comprar unidades, sobre todo en zonas rurales, donde la población que se dedica a la agricultura y a la ganadería no maneja cuentas bancarias por dos razones principales: una por costumbre y dos por falta de ventanillas bancarias. No necesariamente el hecho de manejar dinero en efectivo nos pone enfrente de una persona que está utilizando u obteniendo el efectivo por medio de una actividad ilícita.
A la ley antilavado se suma la creciente violencia en algunos estados de México
Además, a estas complicaciones fiscales se suman los problemas de ventas por el tema de la inseguridad en zonas como Michoacán, Tamaulipas y Veracruz, la homologación del IVA en la frontera, la caída en la confianza del consumidor y el mercado deprimido.
Hay algunos clientes que dicen: ‘por qué te voy a tener que decir a qué me dedico, es mi dinero, ¿quieres hacer negocio o no quieres hacer negocio?’, comentó el ejecutivo de la AMDA.
Las agencias automotrices han tenido que gastar fuertes cantidades de dinero en la capacitación de personal, refirió, e incluso han tenido que contratar a más empleados porque las ventas requieren de un mayor tiempo para lograrse.
En lugar de comprar un vehículo nuevo, el cliente te dice ‘muchas gracias’, y se va al tianguis o agarra el periódico y compra un vehículo usado de uno o dos años, y el cliente sigue manejando el efectivo y no pasa nada, excepto que nosotros perdimos esa venta”, puntualizó Rosales.
La industria automotriz vende un millón 63 mil vehículos por año, y de éstos, cerca del 50% tiene un valor de 216 mil pesos más IVA, lo que obliga a las agencias a abrirle un expediente de identificación al cliente, y guardarlo para una posible y futura verificación de Hacienda.
Lo anterior se traduce en que un 20% de los clientes se encuentra entre los que merecen ser reportados a la Secretaría de Hacienda por ser ventas mayores a los 432 mil pesos más IVA.
Vía | El Universal | AMDA
En Motorpasión México | Top 10: Los autos más vendidos en México hasta el momento.