Nissan Sentra SR, prueba (parte 2)

Como mencionamos en la primera parte del artículo, el Nissan Sentra SR adopta una imagen más deportiva que el resto de la gama. Este look 'racing' le da una chispa extra, aunque sus entrañas siguen siendo las mismas que cualquier otro modelo. En cuestiones mecánicas, el Nissan Sentra SR se podría definir como un auto ideal para la ciudad que además cumple con lo necesario para salir a carretera.

El auto vino a este mundo para volverse el mejor amigo de la cartera de sus dueños. Es cierto que no es el más barato del segmento, pero el costo de mantenimiento es realmente bajo y el consumo de combustible es uno de sus puntos más fuertes. En ciudad, durante la semana que lo tuvimos a prueba, conseguimos un consumo promedio de 11.5 km/l.

Sin pretensiones

Como buen japonés, el Nissan Sentra incorpora una transmisión CVT que, como en todos los autos que la incluyen, ve mucho por el ahorro de combustible, pero poco por el desempeño dinámico. Circulando de manera normal, la transmisión tiende a mantener bajas las revoluciones (entre 1,000 y 2,000 rpm) para lograr buenas cifras de consumo. Una vez que hundimos el pie en el acelerador, notaremos que la caja encuentra un momento extraño para hacer el "cambio" —recordemos que estas transmisiones sólo extienden una misma velocidad—, normalmente después de lo esperado, pero cumpliendo ampliamente con su tarea al momento de realizar rebases o incorporarse a vías rápidas.

Podría pensarse que los 129 caballos de fuerza y las 128 libras-pie de torque que provienen de su motor de 1.8 litros comprometen al Nissan Sentra, pero no es así. Es cierto, la potencia no es su fuerte, pero con un peso de sólo 1,297 kilos, el auto no necesita más de lo que ofrece para moverse con facilidad.

En cuanto a sensaciones de manejo, nos dejó sorprendidos. Se siente estable incluso circulando a velocidades altas; la suspensión no es tan blanda como pensaríamos, ofreciendo un buen balance entre comodidad y firmeza. De hecho, el Nissan Sentra SR es hasta cierto divertido de manejar —con todo y la caja CVT—, pero la carencia de control de estabilidad y de frenos de disco traseros nos invita a ser prudentes. Por lo que cuesta el coche, reprochamos que la firma japonesa no se decida a incorporar estos sistemas de seguridad que vienen de serie en modelos mucho más económicos. El lado bueno es que esta versión sí cuenta con seis bolsas de aire.

Nissan Sentra: nuestra puntuación