Acura TLX Type S 2022, a prueba: poderoso guerrero samurái con ADN deportivo

Fue hace aproximadamente un año, cuando Acura nos presentó a la segunda y más reciente generación de su sedán de tamaño mediano. El Acura TLX, fue introducido en el mercado mexicano con una sola versión disponible, denominada Advance, con un motor de cuatro cilindros turbo, mismo que porta el actual Civic Type R, sin embargo, una variante más radical había sido anunciada desde un inicio, y como no hay plazo que no se cumpla, la nomenclatura Type S, ya está de vuelta.

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¿De qué va?

Type S es el apellido que la japonesa premium, Acura, otorga a las versiones más deportivas dentro de su catálogo, misma nomenclatura que había estado en el congelador por alrededor de 10 años, y qué mejor que un sedán como el TLX para traerla de regreso.

Aparentemente y a simple vista, puede que los cambios estéticos no sean tan evidentes o llamativos, sino que optan por la sutileza necesaria para otorgar un carácter mucho más dinámico al ya de por sí, bien logrado y elegante diseño del TLX.

Esos detalles antes mencionados presumen un color negro brillante y se encuentran estratégicamente colocados a lo largo de toda la carrocería, comenzado con la prominente parrilla tipo diamante tan característica de la marca, así como el labio delantero inferior, carcasas en espejos laterales, un discreto alerón trasero, difusor en la parte baja, que por cierto se acompaña de una cuádruple salida de escape, siendo esta última uno de los mejores añadidos para el Type S.

Por último, rines de aleación, con diámetro de 20”, montados sobre un juego de neumáticos Pirelli P Zero 255/35 R20 y para rematar, calipers en color rojo, que acompañan a los frenos Brembo de cuatro pistones en la parte delantera. El look exterior del Type S es sin duda un balance perfecto entre sofisticación y deportividad.

Por dentro

Al interior nos encontramos con prácticamente el mismo diseño de la versión Advance, sin que por supuesto esto tenga una connotación negativa, sino todo lo contrario. El habitáculo, denota independientemente de lo bien logrado de su diseño, una correcta calidad de manufactura y materiales utilizados en el mismo, sobresaliendo esa sensación de un vehículo premium.

Cómo todo buen vehículo deportivo, existen algunos elementos que resaltan su categoría. Hay presencia de costuras en color rojo, tanto en volante y asientos, así como iluminación ambiental en el mismo tono y algunos detalles en alcántara, y el grabado Type S en las cabeceras de los asientos, mismos que por cierto cuentan con muy buena sujeción y ajuste manual.

Como parte de las amenidades, destacan el Head-Up display de 10.5”, cuadro de instrumentos con computadora de viaje a través de una pantalla de 7” y para el centro de infotenimiento, otra pantalla más, con un tamaño de 10.2”. Hay compatibilidad con Apple CarPlay y Android Auto, presencia de puertos usb, cargador inalámbrico y un muy buen sistema de sonido ELS Studio 3D.

Algo a lo que hay que habituarse y que en lo personal me cuesta un poco de trabajo, es el trackpad disponible para operar la pantalla central, se torna algo sensible y hasta cierto complicada su operación, por lo que puede llegar a ser un distractor. Por otro lado, el interior además de ser atractivo en diseño y completo en equipamiento, goza de muy buen espacio para los ocupantes y por supuesto buen confort en cada una de sus plazas.

La seguridad es primero

El TLX destaca por el gran nivel de seguridad presente, destacan las 10 bolsas de aire y la suite completa de asistencias de seguridad activa y pasiva, denominada Acura Watch que entre algunas de esas asistencias, destacan; sistema de preservación de carril, alerta de punto ciego, asistente de prevención de colisión frontal y trasera, así como función de seguimiento a baja velocidad, por mencionar algunos.

Al volante

Finalmente llegamos a la parte más relevante de esta prueba, claro está, sin demeritar ninguno de los aspectos antes mencionados, pero es que sin lugar a dudas, cuando se habla de una nomenclatura deportiva como lo es Type S, es de suma importancia lo que se encuentra bajo el cofre y cómo se comporta cuando uno se coloca detrás del volante.

Sí, bajo ese enorme cofre vive un bloque de 3.0 litros, V6 turbo, capaz de producir 355 hp y 354 lb-pie de torque, acoplado a una rápida transmisión automática de 10 velocidades y por supuesto, el sistema de tracción integral Super Handling All Wheel Drive o SHAWD.

El TLX Type S, es un gran ejemplo de equilibrio, entregando una marcha sumamente cómoda, ideal para el uso cotidiano, pero por otro lado, también es capaz de ofrecer una conducción dinámica y hasta cierto punto explosiva, haciendo honor al apellido. Digno de destacarse el gran trabajo que se realizó para lograr que el TLX Type S se comporte diferente en cada uno de sus cuatro modos de manejo disponibles, siendo el modo Sport y Sport Plus, dónde más se notan las mejoras en chasis, suspensión, mayor rigidez estructural, una gran calibración de la dirección, sin pasar por alto la buena mordida de los frenos Brembo.

Veredicto

El Acura TLX Type S, no decepciona y en ningún momento le queda grande el apellido, sino todo lo contrario. Un sedán con muy grandes atributos, siendo su diseño, calidad y performance, los más destacables, siendo un gran contendiente en el segmento donde un misil coreano, una italiana y un tridente de alemanes llevan la batuta, pero donde también este guerrero japonés tiene todo lo necesario para subir al ring y salir muy bien librado.

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