A México se importan autos de muchos países, 24 para ser concretos. De todos ellos, China ha cobrado un papel relevante en los últimos años, no sólo por las nuevas marcas que han comenzado operaciones en el país, sino por la cantidad de vehículos importados desde allá. En lo que va del año, China ya es el país del que más autos se han traído a México.
De acuerdo con las últimas cifras reportadas por el INEGI, con cierre al 30 de abril, en lo que va del año en México se han vendido 50,014 vehículos fabricados en China, lo que representa un 22.7% del total de autos importados. Dicho de otro modo, actualmente uno de cada cinco autos importados a México es de manufactura china.
La llegada de marcas como MG, JAC o las de Motornation ha tenido cierta influencia, aunque General Motors es el grupo que actualmente importa más vehículos desde China. Un alto porcentaje de esas 50,014 unidades corresponde a modelos como Aveo, Cavalier, Groove y Captiva —por mencionar sólo algunos.
La tendencia comenzó en 2018
Si revisamos el histórico de cifras reportadas por el INEGI, en 2005 se vendieron sólo 82 vehículos importados desde China. En 2008 se registraron 5,788 unidades y para 2009 la cifra volvió a descender a sólo 49. A finales de 2017 —en coincidencia con el lanzamiento del nuevo Aveo, fabricado en China— comenzó una tendencia al alza, que para los 12 meses de 2018 se tradujo en un total de 93,913 unidades.
Como referencia, Estados Unidos es otro de los grandes exportadores de autos hacia México. En 2018, desde EE. UU. se importaron 139,036 unidades a nuestro país —45,123 más que de China— y hoy, con el recuento de los primeros cuatro meses de 2022, China le ha dado la vuelta con 50,014 unidades, contra sólo 27,850 de Estados Unidos.
Es importante mencionar que la drástica diferencia de unidades se debe en buena medida a la crisis de escasez de semiconductores, que ha afectado con mayor fuerza a Estados Unidos que a China. También ha influido que marcas como JAC y MG continúan ganando participación de mercado.
Todo apunta a que China tendrá un papel cada vez más relevante en el sector automotor mexicano. La llegada de nuevas marcas —como Chirey—, las nuevas flotillas de plataformas de transporte —como Beat y VEMO— y la inminente llegada de movilidad eléctrica proveniente de China —con la que México es afín por costos y características— supondrá cada vez más vehículos de origen chino circulando en México.