La oferta de autos eléctricos en México crece lentamente, y JAC quiere convertirse en protagonista. La firma china ya tiene tres modelos eléctricos a la venta en nuestro país; antes de terminar el año llegarán otros dos. En su catálogo se encuentra el JAC E Sei 1, el coche eléctrico más barato de México —con perdón del Twizy.
El E Sei 1 es un subcompacto de enfoque totalmente urbano. Su talla es de tan solo 3.69 metros de largo, es decir, apenas unos centímetros más corto que un Grand i10. Tiene capacidad para cinco pasajeros, y sus cifras de desempeño dejan en claro que se trata de un vehículo pensado para calles y tráfico pesado.
Para moverse recurre a un motor eléctrico de imanes permanentes, capaz de generar 67 hp y 158 lb-pie. Tiene la ventaja de ser un motor pequeño alimentado por una batería de ion-litio relativamente grande, con capacidad de 41 kWh. La marca promete una autonomía de 320 kilómetros en modo Urban, aunque se puede extender a 400 kilometros en modo Long Range, que limita su velocidad máxima a 60 km/h.
Si bien la potencia del JAC E Sei 1 es limitada, su peso no es tan elevado como el de otros autos eléctricos. JAC anuncia 1,340 kg sobre báscula, que en principio pueden sonar a mucho comparado con sólo 67 hp, sin embargo, el par de 158 lb-pie resulta competitivo y suficiente para moverlo de 0 a 50 km/h en 5.5 segundos. Su velocidad máxima es de 102 km/h.
De acuerdo con JAC, cargarlo de 15 a 100% puede tomar 7 horas; en un cargador rápido, llevarlo de 30 a 80% tarda sólo 54 minutos. La marca ofrece a sus clientes la posibilidad de instalar un cargador en casa, con la infraestructura necesaria y segura, aunque con un costo adicional, que incluye cotización, revisión de viabilidad e instalación. El costo varía según las necesidades de cada cliente.
Equipamiento suficiente para el día a día
El equipamiento de confort del JAC E Sei 1 es muy similar al de cualquier otro subcompacto del segmento A. Tendremos poco más de lo indispensable para el día a día, es decir, un infotenimiento con pantalla de 7" e interfaz JAC Link, aire acondicionado, controles al volante, equipo eléctrico, control de velocidad crucero, sensor de reversa y cámara de visión trasera.
Los acabados lucen sencillos, aunque hay que destacar que la única versión disponible en México incluye tapicería en piel. El interior luce fresco gracias a un cuadro de instrumentos digital —con una pequeña pantalla monocromática al centro— y a una perilla selectora que sustituye a la palanca de velocidades tradicional.
El único margen de mejora importante al hablar de su configuración para México se encuentra en seguridad. Nos parece extraño que JAC se limitara a ofrecerlo con sólo dos bolsas de aire y frenos ABS —sin control de estabilidad ni de tracción— por casi 500,000 pesos, sobre todo al mirar el esfuerzo de la marca por incluir un buen nivel de seguridad en otros modelos.
Una alternativa urbana para contaminar poco
El mercado de los autos eléctricos en México es muy pequeño. De los 1,317,727 autos que se vendieron en 2019, menos de 500 fueron eléctricos. Omitiendo al Twizy, que se acerca más a la denominación de cuatrimoto, el JAC E Sei 1 es el auto eléctrico más barato de México, con etiqueta de 495,500 pesos. El siguiente más accesible es el E Sei 2, con precio de 630,000 pesos, y de ahí damos el salto al Nissan LEAF, por 700,000 pesos.
El JAC E Sei 1 vale la pena sólo si lo pensamos desde el punto de vista de no contaminar, o como un auto para flotillas. Mientras un Chevrolet Beat —equivalente a combustión interna— emite alrededor de 140 gramos de CO2 cada kilómetro, el E Sei 1 emite sólo 64 gramos, poco menos de la mitad. La ventaja es que sus emisiones no son directas al aire que respiramos en la ciudad; se quedan en la planta generadora de electricidad.
Pensar en autos eléctricos en México todavía es complicado, pero da gusto que cada vez haya más opciones y nuevos puntos de carga. JAC quiere acelerar el ritmo de este mercado en México con opciones de bajo costo, en una categoría a la que pocos fabricantes han decidido aventurarse en nuestro país.