Avances tecnológicos hay cada día en toda área, ahora es el turno de Nissan de presentar una propuesta para un problema que tal vez no muchos atienden o entienden. La deshidratación al volante. Este fenómeno se presenta continuamente en pilotos profesionales, pero también los civiles corren riesgo de sufrirlo.
Acorde a la Universidad de Loughborough, Inglaterra, conducir deshidratado tiene un efecto similar al de conducir alcoholizado, aumentando considerablemente el tiempo de reacción y la capacidad de orientación del conductor. Por su parte Nissan, apoyado en este estudio, plantea que sus asientos y volante cambien de color cuando entran en contacto con el sudor, alertando al conductor para que se hidrate.
El proyecto se prueba en un Nissan Juke Soak, esta última palabra corresponde al adjetivo "empapado". El asiento del conductor y el volante se forran de n fibra especial que al entrar en contacto con el sudor cambia a un color amarillo brillante, y una vez que detecta que nos hemos rehidratado, se torna azul.
Algunos de los síntomas de deshidratación son cansancio, dolor de cabeza, mareo, boca seca y tiempos de reacción más lentos. La idea y propuesta de Nissan es buena, sin embargo, no muchos quisieran tener asientos que cambien de color con el sudor, claro que sólo es un concepto y falta mucho para refinarse, pero es bueno saber que las marcas buscan la forma de ofrecer más protección en el camino.
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