En vez de apostar por nombres clásicos, Volkswagen decidió llamar ID a sus vehículos eléctricos. La estrategia le ha funcionado, pero deja al aire una pregunta: ¿qué sucederá con nombres históricos y tan relevantes, como Golf, cuando ya no haya lugar para motores de combustión interna? Thomas Schafer, CEO de Volkswagen, comienza a disipar dudas.
Nuestros colegas de Autocar conversaron con el directivo de la marca durante el Auto Show de Los Ángeles. Al preguntarle sobre si dejarían morir el nombre Golf, Schafer respondió que de ninguna manera, que tienen nombres icónicos como Golf y GTI, y que sería una locura dejarlos morir. Se apegarán a la nomenclatura ID, pero conservarán su nombre original.
Esta declaración confirma que el Volkswagen Golf no tiene los días contados, pero sí deberá transformarse en un vehículo eléctrico para mantenerse en el portafolio de la marca, muy probablemente bajo el nombre ID.Golf y posicionado por debajo del ID.3 pues, como explica Schafer, el ID.3 nunca fue pensado como reemplazo del Golf, sino más bien como una clase de Golf Plus —la versión monovolumen— en formato eléctrico, por lo que ambos modelos podrían convivir perfectamente en la gama en un futuro completamente eléctrico.
La generación actual —la octava— sería la última con motor de combustión interna. Su ciclo de vida deberá terminar entre 2027 y 2028, para dar paso a un nuevo hatchback completamente eléctrico, que adaptaría sus variantes de alto desempeño (GTI e incluso R) a un formato libre de gasolina.