GMC es una marca de transición para General Motors, pues se coloca justo entre la generalista de Chevrolet y la premium de Cadillac. Comparten muchos elementos entre productos, pero cada uno con la dosis exacta de lujos comodidades y poder para poder diferenciarse. En esta ocasión acudimos a la presentación del nuevo GMC Yukon 2021 en México, un hermano más refinado del Suburban, pero algo más casual que el Escalade, acompáñanos a conocerlo.
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Imponente por donde lo veas
Los SUV full size tienen la función de ser los vehículos más cómodos para viajar en nuestros días, en ellos el espacio abunda y es parte fundamental de su esencia. Con el GMC Yukon tomando como base lo que vimos con la nueva generación de Chevrolet Suburban y Tahoe ya tenemos una gran y solida pieza central por la que comenzar.
A nivel estético no podemos negar los parecidos en algunas líneas de carácter,especialmente en los costados. Sin embargo, cada marca le dio su toque especial para delimitar su enfoque. En el caso de GMC hay algunos trazos robustos, pero que se suavizan para una imagen más refinada y que obviamente se iban a aderezar con mucho cromo al puro estilo estadounidense.
Viéndolo de frente llama la atención su enorme parrilla que da cierta ilusión de malla y que se complementa por nuevos faros LED con firma en forma de C, algo muy característico de GMC. Los costados nos dejan ver unos rines de 22" y la parte trasera de nuevo con calaveras LED. en forma de C. Como era de esperarse cuenta con estribos retráctiles para ayudarnos a subir o bajar de la camioneta sin mucho esfuerzo.
Interior que busca elevar el refinamiento
Por dentro el GMC Yukon es una evolución del Suburban, sí usan misma plataforma, comparten tecnología y muchos componentes, pero en este caso GMC le dio algunos acabados más refinados para ir acorde con esa etiqueta también más elevada. Recordemos que la versión Denali es la más alta de la gama y por ello mismo el uso de piel, madera real y otros materiales más refinados son una norma este Yukon.
La percepción es buena y también se muestra como un gran progreso respecto a otros modelos, si bien esa es una percepción que domina, aún hay detalles de plásticos duros en las zonas más bajas y algunos botones que podrían mejorar para dar más armonía al ambiente lujoso que busca, pero al menos en lo más importante que es comodidad, espacio y tecnología no decepciona.
En el puesto de conductor simplemente disfrutas de una posición alta que te permite ver bien a donde sea que dirijas la mirada. Frente a ti te encontrarás un cuadro de instrumentos aún análogo, vaya sí lleva una pantalla a color al centro que entrega muy buena información y es fácil de usar, pero al menos el velocímetro, tacómetro, medición de combustible y otros siguen siendo análogos.
El volante es del estilo propio de GMC y el tablero en general toma un diseño distinto al de Suburban. En generaciones pasadas básicamente conservaban las mismas formas, pero afortunadamente ahora sí hicieron un cambio más grande para separarlos un poco más. Esto al menos en la versión Denali, pues la AT4 sí conserva mucho de Suburban, aunque como tal dicha variante no está en nuestro país.
Encontraremos una pantalla táctil de 10.2" compatible con CarPlay y Android Auto de forma inalámbrica, además nos permitirá ver información de la camioneta, o darnos acceso al WiFi a bordo, mismo que cuenta con datos ilimitados por los primeros 12 meses tras comprar la camioneta. También esta pantalla de muy buena resolución y velocidad nos permitirá ver la visión de 360º generada a través de las cámaras colocadas al frente, en espejos y la parte trasera. Por si fuera poco, continua ofreciendo el espejo retrovisor digital, que con el activar de un switch lo hace transformarse en una pantalla con una vista más elevada.
El resto del equipo interesante puede resumirse en aire acondicionado automático de tres zonas, asientos en piel con memoria para el conductor, de ajuste eléctrico para copiloto, ventilación y calefacción para conductor y copiloto, y calefacción para los asientos traseros.
También hay sistema de audio Bose de 14 bocinas con cancelación de sonido, dos pantallas de 12.6" en los respaldos de los asientos delanteros compatibles con consolas de videojuegos y otros reporductores, reproductor de Bluray y DVD, acceso sin llave, apertura de cajuela manos libres y techo panorámico, entre otros.
Una de sus grandes ventajas es el espacio, pues abunda desde lo que cabe en puertas, guantera, la consola central que es enorme y que incluso puede deslizarse unos centímetros para liberar espacio o ayudar un poco a los ocupantes de la parte trasera. La tercera fila sí recibe mucho espacio extra, vaya aún la posición no es tan relajada y holgada como en la segunda fila, pero definitivamente se puede ir mucho más cómodo en esa área. Acorde al tipo de carrocería podremos tener una capacidad de cajuela de 772 litros con todos los asientos en su lugar en la versión L y de 1,175 litros en la XL.
Poder para mover un pequeño departamento con ruedas
El espacio y comodidad del GMC Yukon es supremo, vaya sientes que viajas en una pequeña casa con ruedas y no lo digo de forma despectiva, es un verdadero reto lograr ese nivel de comodidad, pero si algo saben hacer las marcas estadounidenses es exactamente eso. Para poder mover un vehículo tan equipado, grande y por ende pesado necesitas una planta de poder al nivel. Por ello GMC usó el V8 aspirado de 6.2 litros capaz de entregar 425 hp y 460 lb-pie de par que mueven las cuatro ruedas gracias a una caja automática de 10 cambios.
Lo que tenemos aquí es el poder suficiente para impulsar un vehículo que pasa sin problema de las 3.2 toneladas, todo un titán del asfalto. El actuar del motor no es explosivo, más bien, al hundir el acelerador sientes un empuje como el que te llevas cuando un avión comienza a acelerar para despegar.
El manejo es suave y aunque los caminos estén muy maltratados la suspensión hace un gran trabajo para que tú te olvides de la incomodidad que esas imperfecciones causan. El modelo que manejamos no contaba con la suspensión de aire adaptativa, sin embargo, todos los Yukon 2021 que se entreguen a los clientes de la marca lo llevarán de serie y en ese caso seguramente la suavidad y estabilidad del auto será aún más notoria.
La dirección evita sentirse pesada, tal vez en carretera algo más de firmeza no estaría mal, pero fuera de ello se entiende que su función principal será minimizar la fatiga de quienes lo conduzcan o viajen en él durante horas y horas de carretera.
El balanceo de carrocería es básicamente una regla en un vehículo de estas dimensiones y a pesar de que se nota dicha inclinación, no hubo indicios de que nos aproximáramos rápidamente al límite de sus capacidades, podría soportar más seguramente, pero en caminos públicos es mejor llevar más precaución.
La ruta que cubrimos de la Ciudad de México a Valle de Bravo nos entregó poco más de 250 kilómetros de recorrido, la mayor parte del mismo en carretera, así que no hay una referencia muy clara de su consumo en ciudad, sin embargo, en ese tiempo rondamos entre los 4.8 km/l y los 5.2 km/l. Cifras altas, pero teniendo en cuenta, peso, tamaño de motor y aerodinámica, no está mal.
Sus asistencias son justo lo que esperarías de un segmento y precio de este tipo, van desde lo típico como frenos ABS y control electrónico de estabilidad, hasta la siempre agradecida alerta de punto ciego, mantenimiento de carril, freno autónomo de emergencia, alerta de tráfico cruzado con alertas sonoras y vibración en el asiento —este último algo inusual, pero que definitivamente llama la atención por la intensidad de la vibración de los asientos—, y visión de 360º. OnStar va de serie en ambas carrocerías y como ya te contaba, ofrece 12 meses de datos ilimitados incluidos, después de eso hay que contratar el servicio.
No hay una brecha tan grande con el Suburban
El GMC Yukon 2021 es para el que necesita el espacio de un Suburban o Tahoe, pero tal vez quiere algo más elegante y refinado que los ya mencionados de Chevrolet. En este caso la versión más cara del Suburban tiene un costo de $1,624,500, mientras que el Yukon llega a $1,799,900, una diferencia de $175,400. Mientras que entre Tahoe y Yukon L la diferencia es de $195,290 —al momento de redactar esta nota—. Un precio que no se dispara tanto como entre otros modelos y que sí te dará ciertas ventajas extra en varios apartados.
El GMC Yukon 2021 es un producto sorprendente, pero hay algunos detalles que por precio nos hubiera gustado ver por ejemplo un cuadro de instrumentos totalmente digital, tal vez el control de velocidad crucero adaptativo, función de masaje, entre otros. Sí, algunos suenan a capricho, pero por ese precio y categoría serían grandes diferenciadores, aunque también debemos recordar que si bien GMC está un escalón por encima de Chevrolet, aún no es el máximo exponente en lujos y comodidad de General Motors, para eso está el Cadillac Escalade que seguramente cubrirá todos esos detalles, con mejores acabados aún, pero con un claro aumento de precio.