BYD se encuentra replicando una fórmula de éxito en cada uno de sus vehículos, y aunque a muchos les cueste trabajo creerlo, la marca de origen chino ya vende más vehículos electrificados que la misma Tesla a nivel mundial. Hoy se adentra en el segmento de los B-SUV con la llegada a México del nuevo Yuan Pro, un producto que sí, también es eléctrico y ya lo tuvimos en nuestras manos.
Inspiración oriental
Iniciemos por lo evidente, su diseño. Este modelo sigue la misma línea que el resto de los SUV en la gama, es decir, una imagen fresca, dinámica, juvenil y con ese toque que por donde lo veas, luce tecnológico. Tenemos líneas que fluyen con soltura por toda la carrocería e iluminación en LED tanto en faros como en calaveras que sobresalen de todo el conjunto visual. Para ser más exactos, su diseño se llama Dinasty y está inspirado en el dragón de dicha cultura oriental.
BYD Yuan Pro EV mide 4,310 mm de largo, 1,830 mm de ancho, 1,675 mm de alto, con una distancia entre ejes de 2,620 mm. Por ponernos en contexto, es más o menos de la talla de un Seltos y más largo que un Tracker o un Raize.
Una cabina bien preparada
En temas de equipamiento, desde el exterior empiezas a notar que se trata de un SUV que fue creado para cubrir más que sólo las necesidades mínimas de movilidad. Al interior se vuelve todo mucho más evidente.
Poco a poco empieza a ser familiar encontrarnos con modelos de BYD en los que su principal foco son las pantallas grandes, el juego con la iluminación ambiental y una amplia combinación de materiales, todos de buen tacto y que convencen a la vista. Yuan Pro, pese a ser el más pequeño y accesible de la gama SUV, no es la excepción.
Ofrece una pantalla LCD de 8.8 pulgadas para el cuadro de instrumentos, una pantalla central LED de 12.8 pulgadas —obviamente giratoria como ya empieza a ser costumbre en BYD— compatible con Android Auto y Apple CarPlay inalámbricos, además de responder a comandos de voz con tan solo decir: “Hi BYD”. Y sí, también está conectada a internet.
El modelo también cuenta con un buen espacio para cinco pasajeros, con una cajuela de hasta 1,210 litros abatiendo los asientos traseros, aunque su volumen original es suficiente para labores urbanas, incluidas visitas al supermercado con el carrito lleno.
Al volante es exactamente lo que esperas
Si esperabas sensaciones deportivas, estás mirando al modelo equivocado. Al volante, el BYD Yuan Pro es exactamente lo que esperas de un SUV eléctrico de enfoque urbano. Es fácil de conducir, incluso para quien nunca se ha puesto al mando de un vehículo eléctrico.
Cuenta con modos de manejo que cambian su forma de entregar la potencia. Si lo que quieres es un ahorro total, lo puedes tener; si deseas algo de diversión al volante, el modo Sport le quita todos los límites a su motor eléctrico y consigues una aceleración hasta cierto punto explosiva. La ventaja de su propulsión eléctrica es que la respuesta es instantánea, y con 174 hp y 213 lb-pie, su aceleración es mucho mejor que cualquier otro SUV a gasolina de esta talla (o este precio)
A nivel sensaciones, siendo muy honesta, es muy difícil que un vehículo eléctrico sea muy comunicativo al volante. Yuan Pro se orienta por completo a la comodidad, con una suspensión blanda —bien pensada para ciudad— pero que no propone demasiado en términos deportivos. Volvemos a lo ya dicho: no puedes esperar dinamismo de un SUV orientado a la ciudad, pero aún así, con el peso de la batería colocado en la zona baja, el Yuan Pro se apoya bien al pasar por curvas.
La batería es de la familia Blade de BYD y es una de las más avanzadas del mercado. BYD es la única marca de autos que desarrolla y fabrica sus propias baterías, y lo hace con pruebas tan extremas, que incluso las ha perforado sin que lleguen a explotar. En Yuan Pro, la batería es de 45 kWh, suficientes para recorrer 380 km con una carga. Durante nuestra breve toma de contacto no pudimos comprobar totalmente su autonomía, pero el ritmo de consumo al que lo probamos se acercaba a esa cifra. Con el 66% de carga aún nos quedaban 251 km de autonomía.
Un SUV con alto poder de convencimiento para cambiarte a lo eléctrico
Pasemos a lo que seguramente estarás cuestionándote ¿vale la pena? Y la respuesta es sí. Hoy en día pensar en adquirir un vehículo eléctrico implica no solo dar ese paso y hacerte acreedor a los beneficios que conlleva tener un coche de este tipo, sino también saber conducirlo.
¡Ojo! No estamos diciendo que tengas que aprender a conducir desde cero, pero sí entender cómo funcionan los coches eléctricos para que no vivas con la preocupación de que tu coche te deje varado. Para ello te pondremos un ejemplo bastante sencillo; a tu coche eléctrico lo tienes que tratar como un teléfono celular. Eso quiere decir que lo debes de cargar en casa para que su funcionamiento sea optimo y te quites de preocupaciones durante todo el día. Tu smarthphone no vas y lo cargas todos los días en una plaza comercial ¿verdad?...así que teniendo tu propio cargador en casa, lo demás es pan comido.
Si tus rutas son mayormente por ciudad, lo que gastarás en electricidad será mínimo en comparación con lo que te estarás ahorrando en gasolina. Hay un ligero sobreprecio comparado con un SUV de este tamaño a gasolina, pero la brecha es tan pequeña, que —según los kilómetros que recorras al día— podrías compensarlo en tan solo un año. Su clave está en el precio, y es que con etiqueta de 579,800 pesos, el Yuan Pro queda justo al nivel de los topes de gama de cualquier B-SUV.