Sorprendente, fin. Nos leemos en la siguiente prueba... Si pudiera con esas simples palabras definiría al Porsche Taycan Turbo S. Con tan poco texto habría terminado esta nota, te dejaba el video y la galería de fotos que tanto disfruté tomar y editar. Sin embargo, intentaré transmitirte todas las sensaciones que me llevé al manejar al auto que más me ha sorprendido y que definitivamente marca un punto histórico no sólo para Porsche, lo marca para la historia del automóvil.
En video
Todo fue como sabíamos que sería, menos el auto
Para esta prueba de manejo recibimos la información del punto de partida y la ruta que haríamos para conocer al Porsche Taycan, saliendo desde un pequeño circuito cerca de La Marquesa en el Estado de México y con destino final, Valle de Bravo. El evento transcurrió con normalidad, nos saludamos entre colegas y tomamos algunos módulos de información para conocer más al Porsche Taycan.
Hasta este punto ya habíamos podido ver el auto, nos lo imaginábamos rápido y pensábamos que sería una prueba de manejo muy divertida. La realidad comenzó a transformarse poco a poco. De inicio nos recibió un Porsche Taycan Turbo S en color azul con los famosos rines "Mission E Design" de 21" que justamente toman la esencia de los rines que calzaba el Porsche Mission E, aquél concepto que hace varios años nos dio un adelanto de lo que vendría.
Da gusto ver que Porsche haya mantenido gran parte de la esencia del Mission E en el Taycan, los trazos principales se quedaron y cuando lo vez de frente o por tu retrovisor no hay duda de lo mucho que impone. El Porsche Taycan mide 4.9 metros de largo, es algo más corto que un Porsche Panamera, pero no por ello escatima en poder.
Cada parte de su exterior fue pensado para ser lo más aerodinámico posible, por ello incluso cuenta con un sistema de aerodinámica activa que acorde la necesidad de eficiencia o desempeño, puede abrir o cerrar compiertas y elevar o esconder un difusor y el alerón con el fin de maximizar su desempeño.
De igual forma, hasta las manijas están enrasadas a la carrocería para evitar cualquier perturbación al flujo del aire que pudiera crear arrastre. Hasta hoy con un coeficiente de arrastre de sólo 0.22 CD, el Porsche Taycan es el auto más aerodinámico que ha producido la marca.
Otros detalles interesantes son sus calaveras que siguen el lenguaje actual de la marca al estar compuestas por una tira de luz LED que lo recorre de extremo a extremo. Sus faros, hay que aclarar llevar tecnología Matrix LED.
La verdadera sorpresa, un manejo que parece desafiar las leyes de la física
Al hablar de un Porsche lo primero que queremos conocer es su desempeño y no se puede culpar a nadie por ello. Las especificaciones son claras y alarmantes. Un sedán eléctrico de 2.3 toneladas de peso que puede hacer el 0-100 km/h en sólo 2.8 segundos, además alcanza los 260 km/h como velocidad punta. Todo esto gracias a una potencia de hasta 750 hp y 774 lb-pie de par.
Toda ese poder viene de una arquitectura eléctrica de última generación y que sentará las bases de grandes avances en este campo. Para empezar el Porsche Taycan Turbo S se mueve gracias a dos motores eléctricos, uno en cada eje. El frontal técnicamente lleva una transmisión simple que o lo mueve hacía adelante o lo mueve hacia atrás. Sin embargo, el motor trasero sí cuenta con una transmisión de dos marchas.
La lógica detrás de esto, es que durante los momentos de arranques de mayor exigencia, la primera marcha dosificará de la mejor manera posible, junto a la eléctrica del auto, el par que llega a esas ruedas para no desperdiciar ni un poco de poder para obtener el mejor despegue.
La segunda marcha entrará en acción una vez que se ha ganado velocidad y se encargará de simplemente buscar mayor eficiencia en todo momento. Normalmente tanto el Taycan Turbo, como el Turbo S generan 625 hp. Sin embargo, para arranques con el Launch Control, activan un sistema llamado "overboost" que les permite llegar a los 680 hp para la variante Turbo y los 750 hp para el Turbo S.
Con el selector de modos de manejo podremos usar un modo llamado Range que limita el uso a sólo el motor delantero y una velocidad punta de hasta 110 km/h. Este modo está pensado para el uso en ciudad y tratar de exprimir los mejores niveles de autonomía. Por cierto, usa un paquete de baterías de 93.4 kWh que le dan una autonomía estimada de 412 km al Turbo S y 450 km al Turbo.
El siguiente modo de manejo es el modo Normal y en este caso hay un balance entre el poder que entregan ambos motores, las reacciones son rápidas, pero hasta cierto punto con algo de mesura para no agotar tan rápido la carga.
El modo Sport eleva la respuesta de todo componente en el auto, la suspensión se vuelve más firme y acelera su reacción para mitigar el balanceo de carrocería; la dirección más pesada y la aceleración es más explosiva.
El Modo Sport Plus lleva todo lo bueno del modo Sport a un nivel más alto y es en este modo donde sus capacidades quedan liberadas totalmente para las mejores reacciones en cualquier situación, además es en este modo donde se puede activar el Launch Control.
Una vez en el camino es casi imposible explicar a la mente como un auto tan pesado puede agarrarse tan bien al piso, dar curvas a velocidades que por lógica pura terminarían en despiste. Su secreto es un eje trasero direccionable, una suspensión adaptativa, un centro de gravedad muy bajo gracias a la posición de las baterías, el trabajo de la aerodinámica activa, la gestión impresionante de la tracción, entre muchos otros.
Gracias a este conjunto de elementos el auto se puede comportar como todo un deportivo y es que mientras algunas marcas primero piensan en hacer un coche de lujo al que después le añaden deportividad –y vaya que les funciona por que han creado autos impresionantes–, Porsche siempre ha comenzado fabricando un auto deportivo al que después se le añaden los lujos y justo en esa planeación radica su eficacia en los caminos con curvas, donde autos como el Tesla Model S simplemente jamás podría alcanzar al Taycan.
Hacer una aceleración en el Taycan es indescriptible, realmente llega a asustar la fuerza con la que sale disparado y yendo a tal velocidad, también necesitarás detenerte con fuerza, por ello los modelos Turbo S vienen equipados de serie con frenos carboncerámicos y pinzas de frenos delanteras de 10 pistones. Una vez que entran estos frenos la desaceleración es tan brusca como el despegue.
Al final del día el Porsche Taycan Turbo S puede ser tan salvaje como un verdadero deportivo hardcore o puede ser tan dócil como un Gran Turismo con el cual puedes vivir en la ciudad y usar a diario. La decisión recae en lo que quiere experimentar el conductor.
Interior de primera calidad y tecnología de punta
Podría pasar cientos de párrafos más explicando cada una de las sensaciones de manejo, pero también hay que hablar del interior. Por dentro el Porsche Taycan nos termina de confirmar que es una supercomputadora con ruedas.De primera instancia al subir lo que llama tu atención es el cuadro de instrumentos digital de 16.8" y de forma curva.
Este cuadro de instrumentos nos deja ver de forma clara y directa la información que deseemos, desde una vista limpia sólo con la velocidad, el mapa o tres relojes con datos de desempeño. Es altamente personalizable y también integra controles táctiles para las luces, la firmeza de la suspensión y el elevador del eje delantero para evitar raspones.
Al centro tenemos la pantalla del sistema de infotenimiento con un tamaño un poco más grande que las 10", desde esa pantalla principal podemos acceder de forma rápida y sencilla a toda la información del auto, datos de carga, entretenimiento, navegación e incluso actualizar el software del a través de la nube.
Más abajo lleva otra pantalla táctil dedicada para detalles de comodidad, aunque también cuenta con algunos atajos para funciones que se despliegan en la pantalla central. Esta tercer pantalla cuenta con una retroalimentación a través de vibración para que nos confirme que de verdad ejecutamos una acción.
A nivel ergonomía todo es fácil de encontrar, no tardas en entender su funcionamiento y es muy sencilla de operar. Hablando de acabados el Taycan sigue la receta del resto de la marca, ensambles impecables, y muy buena calidad en la selección de materiales. La falta de motor lo hace sumamente silencioso al andar, aunque a velocidades altas sí es algo notorio el ruido de la suspensión y ligeramente el del rodar de las llantas.
Los asientos de algunas versiones se fabrican con materiales veganos, dan la sensación de ser asientos forrados en piel, pero en realidad no lo son. De igual forma puedes optar por tela y varios otros materiales dentro de la selección de opciones a personalizar.
Su interior recibe una gran cantidad de luz gracias al gigantesco techo panorámico. La parte trasera es cómoda para dos adultos, tal vez alguien de más de 1.80 o 1.85 metros encuentre algo difícil subir y bajar del auto, pero al menos el suelo llega un corte especial dentro de la zona donde estarían las baterías para permitir tener las piernas un poco más abajo y así lograr una posición más cómoda.
En cuanto a capacidades, al ser un auto eléctrico y usar motores considerablemente más pequeños y situados más atrás de lo normal, el frente cuenta con un espacio de 81 litros, perfecto para una o dos mochilas, mientras que la cajuela ofrece 366 litros de capacidad.
El nacimiento de una nueva era
Pocas veces hemos encontrado un auto tan especial y es que más allá de ser eléctrico, también tomó cada parte de la esencia de la marca. Sin importar su peso, sin importar su comodidad, sin importar nada se maneja como un Porsche. Puede ser un coche de diario si estás dispuesto a tener mucho cuidado con los topes que abundan en México, o bien puede ser tu coche de fin de semana, puede con todo ello.
Con este auto Porsche demuestra que los límites de los coches eléctricos se pueden romper y ya se están quebrando. Eso sí, este es el primer paso y podremos esperar muchas sorpresas a futuro tanto con el Taycan como con otros modelos. Ahora habrá que ver como reacciona la competencia y nosotros simplemente no podemos esperar.