Anteriormente Audi nos había dado algunos detalles de lo que sería su próximo vehículo autónomo: el AI: ME un concepto perfecto para las mega ciudades; ahora la firma revela todos los detalles que envuelven a este peculiar modelo que sin duda es un gran salto hacia el futuro de la marca.
El nombre AI: ME tiene un por qué, y es que enfatiza la relación con el Audi AIcon, el estudio de la operación de larga distancia automática introducida en 2017.
En bocetos se mostraba un diseño único, ahora con las imágenes oficiales observamos una imagen diferente a lo que estábamos acostumbrados, es un vehículo con líneas muy bien marcadas, un frente agresivo y con una carrocería que a simple vista parece pequeña, pero con el gran espacio interior que ofrece, esta idea desaparece.
Este modelo fue diseñado para su uso en ciudad y con un nivel 4 de autonomía, hasta ahora, este nivel es de los más altos que existen en cuanto a vehículos autónomos.
Si bien los sistemas con nivel 4 no requieren asistencia por parte del conductor, su función se limita a un área específica, como carreteras o ciertas áreas en la ciudad. En estos lugares, el conductor puede transferir completamente la tarea de conducir al sistema y poder disfrutar de la comodidad del interior.
Interior de otro mundo
Al tratarse de un vehículo con estas características, las cualidades que ofrece en su interior son de suma importancia; este modelo fue concebido bajo esa idea, entretener a los ocupantes de la manera más cómoda posible.
Para generar un ambiente de tranquilidad, al activar el modo autónomo, en automático elementos como el volante y los pedales se ocultan en un compartimiento para convertir el habitáculo en una sala de cine. También incorpora imanes en lugar de portavasos para sostener piezas de metal o incluso platos.
Los asientos son un aspecto en lo que se puso especial atención, las plazas delanteras cuentan con un amplio y cómodo espacio, tapizado con material textil en tonos cálidos de gris. Los respaldos están diseñados como conchas curvas que se unen al cojín del asiento solo con un soporte vertical.
El vehículo y los sistemas de comunicación e interacción se operan mediante seguimiento ocular, comandos de voz y campos sensibles al tacto, se colocan perfectamente en términos de ergonomía y normalmente se integran en la superficie, haciéndolos invisibles. Por ejemplo, la iluminación se activa solo cuando se acerca, y guía la mirada del usuario a las superficies funcionales.
Los menús por ejemplo para navegación o infoentretenimiento, pueden activarse a simple vista y luego abrir más niveles que se mueven desde el fondo al modo de vista nítida en el monitor 3D.
También encontrarás a bordo unas gafas de realidad virtual para ver películas o incluso juegos interactivos que, en conjunto con el sistema de sonido de alta calidad, que incluso está acoplado a una compensación de ruido que puede suprimir completamente el nivel de ruido exterior, genera un ambiente como si estuvieras en casa.
Un detalle que pareciera ser de otro mundo es el uso de plantas reales en el interior, esto con el fin de ofrecer a los ocupantes un acercamiento con la naturaleza a la vez que se mejora la calidad del aire y con ayuda de un filtro, evitar malos olores del exterior.
La tecnología es el límite para este modelo, pues también cuenta con sistemas que determinarán el nivel de estrés de los ocupantes; por medio de algoritmos inteligentes, se podrá acceder a todo un estudio de salud y así saber qué puntos mejorar.
Comunicación exterior
Cuando hablamos de vehículos autónomos y eléctricos, que son modelos que ya no generan ningún tipo de ruido exterior, en este caso, el trabajo de los faros va más allá de cumplir con su función.
Los faros generarán una serie de señales dependiendo de las condiciones de tráfico habituales para poner en contexto al resto del ambiente. Por medio de las luces LED y de símbolos, los peatones sabrán cuando pueden cruzar la calle, dichas señales se pueden proyectar ya sea en la calle o en una pared.
Como vehículo de nivel 4, el Audi AI: ME está equipado con faros LED brillantes y luces traseras y de freno perfectamente visibles para todas aquellas situaciones en las que los conductores tomen el control del vehículo.
Este modelo se convierte en la nueva era de vehículos Audi, un concepto totalmente innovador y único que dominará las calles en un futuro.
