Los acuerdos de colaboración en esta época de transición para la industria automotriz parecen ser cada vez más comunes, y es que, ante la inminente migración hacia la propulsión electrificada, varios gigantes de la industria están moviendo sus piezas para encaminarse de manera correcta, y en esta ocasión General Motors anuncia su acuerdo de colaboración con Nikola, el pequeño fabricante de coches eléctricos.
De acuerdo con la información dada a conocer, General Motors proporcionará a Nikola servicios de ensamblaje, validación y fabricación para todos sus vehículos a cambio de dos mil millones de dólares en acciones de la compañía, lo que viene a representar el 11 por ciento de la pequeña empresa.
Así General Motors tendrá derecho a nombrar un nuevo director general para Nikola y obtener conocimiento del desarrollo Nikola Badger, Three, One, Two y NZT.
Por su parte Nikola se beneficiará de la enorme capacidad de producción, validación y ensamblaje del gigante norteamericano, así como de su nueva plataforma eléctrica Ultium y sus baterías eléctricas de última generación, tanto las químicas tradicionales, como las baterías de combustible Hydrotec.
Si bien en la actualidad, parece ser que los vehículos eléctricos tradicionales comienzan a ganar mucho terreno frente a cualquier otra forma de propulsión ecológica, la realidad es que muchos creen que en el mediano plazo los automóviles con batería de combustible de hidrógeno dominarán el mercado, pues ofrecen varias ventajas frente a sus rivales químicas, como una autonomía mayor y un sistema de recarga en minutos, tal como ahora se hace con los vehículos de gasolina y diésel.
Este trato definitivamente nos trae a la mente otros más que se han firmado por gigantes de la industria automotriz con pequeños fabricantes eléctricos, como el de Rivian con Ford, quienes también podrán aprovechar la enorme capacidad de producción de la firma del óvalo, a cambio de compartir los secretos y capacidades de su exitosa plataforma “Skateboard” de Rivian, quien, por cierto, también tiene su sede en Detroit.
De cualquier manera, el trato es bastante benéfico monetariamente hablando para ambas marcas, pues mientras General Motors espera obtener ganancias por 4 mil millones de dólares por este trato, entre suministro de baterías, créditos de ventas de vehículos y el valor de las acciones, Nikola espera ahorrarse una cantidad similar por el desarrollo de las baterías, cadenas cinemáticas de producción aparte de mil millones más entre costes de ingeniería y validación.
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