Tal y como había sido anunciado hace algunas semanas, la gama SUV de Mazda atravesará por un importante proceso de expansión en los próximos 2 años. El Mazda CX-50 es el primero en llegar, y se presenta como un nuevo SUV compacto —de talla y diseño similar al CX-5— de enfoque más jovial y aventurero.
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Lo primero que debes saber es que, por muy similar que se parezca a la propuesta del CX-5, el nuevo Mazda CX-50 es una adición a la gama; no llega para reemplazar a ningún modelo —al menos por ahora—. Participará en el mismo segmento que el CX-5, pero ofrecerá tecnología más avanzada y capacidad todoterreno.
El sabor off-road se refleja desde el primer vistazo. El CX-50 mantiene el ADN de la marca, pero a la vez luce líneas más toscas; reemplaza los detalles cromados por acabados negro brillante y deja una amplia superficie con plástico sin pintar para protegerse de arañazos al momento de la aventura. La carrocería estrena la opción a un color llamado Zircon Sand.
Si desde fuera le encuentras cierto parecido con el CX-5, el interior en definitiva es un borrón y cuenta nueva. El tablero apuesta por un diseño horizontal, donde las protagonistas son unas vistosas rejillas de A/C colocadas verticalmente y cuyas formas evocan la robustez de un todoterreno. También encontraremos una pantalla de generosas dimensiones, cuadro de instrumentos parcialmente digital y tapicería en cuero bitono, con opción a un nuevo color llamado Terracota.
A lo largo de sus opciones de equipamiento encontraremos techo panorámico, cámara de visión de 360º, climatización automática de dos zonas, asientos delanteros con calefacción y ventilación, múltiples asistencias de conducción y un nuevo selector de modos de manejo, con un programa específico para off-road.
El Mazda CX-50 fue desarrollado a partir de la misma plataforma que el Mazda3 y el CX-30, por lo que compartirá la oferta de motores. La marca no ha especificado números, pero sí menciona que estará disponible con motor atmosférico de 2.5 litros y su variante turbo de la misma cilindrada —con potencia en torno a 188 y 230 hp, respectivamente—, ambos asociados a una caja automática de seis cambios y tracción integral. Más adelante llegarán variantes electrificadas, incluyendo una versión híbrida.
Mazda se encuentra ajustando los últimos detalles para que el CX-50 comience a fabricarse. Su producción iniciará en enero de 2022 en la nueva planta que construyó en conjunto con Toyota en Alabama, Estados Unidos. Podemos esperar su llegada a México a mediados de 2022.
