Cuando estas tratando de vender un producto y tienes competencia lo primero que intentas hacer es crear algo mejor que lo que ellos ofrecen, exaltar sus cualidades y demostrar por qué es mejor tu producto, técnicamente esto es lo que hizo un concesionario de Skoda en Irlanda, pero lo hizo de una manera muy distinta, al comparar su Superb con un BMW Serie 5.
El cliente mismo comparará los autos, no hay más, este concesionario confía tanto en su producto que se atreve a ofrecer tal reto, sin embargo, las cosas van más allá del reto en si, se trata de una forma inteligente de acercarse a los verdaderos clientes potenciales para Skoda.
En Europa el Superb tiene como rivales principales al Volkswagen Passat y Ford Mondeo, entre otros, algo muy lejano en muchos aspectos al BMW Serie 5, por lo que es fácil deducir que quien compra un Serie 5, no tiene en mente al Superb como una alternativa directa. El truco o la atracción es para quienes va dirigido el Superb, ya que al compararlo con un BMW se obtiene el efecto de sentir que estamos comprando un producto "similar" por un precio mucho más bajo. Un truco simple que puede llegar a convencer a uno que otro.
De ninguna manera le restamos importancia al Superb, más bien exaltamos la agilidad de Pilsen Auto, el concesionario irlandés, para atraer la atención de clientes potenciales. Para que nos demos una idea un BMW Serie 5 básico tiene un precio de 45,200 euros, mientras que el Skoda Superb de acceso se ofrece en 26,995 euros.
Fotografía | Worldcarfans.com
En Motorpasión México | Skoda VisionS, el SUV compacto con sabor checo y propulsión híbrida