El Volkswagen Lupo –o Fox, dependiendo de la región– ha probado su suerte alrededor del mundo, pero ni en México ni en Europa ha tenido mucho éxito, por lo menos igual que en su natal Brasil, donde además de gozar de ventas saludables recién dio a conocer su nueva generación. Cualquier parecido con el Golf NO es mera coincidencia.
La más reciente ola de productos de Volkswagen ha demostrado que todos quieren ser como el Golf. Dado el éxito del modelo en Europa, podemos entender que la firma alemana quiera replicar la fórmula para los modelos más pequeños, sobre todo a nivel visual.
El nuevo Volkswagen Fox 2015 es prácticamente una copia al carbón de la séptima generación del Golf, aunque es más estrecho y con una apariencia más bien de monovolumen. Aunque el frente hereda fascia, parrilla y faros del ya citado compacto alemán, la parte trasera del nuevo Fox es un híbrido entre un Passat y un Up –raro, pero cierto. El resultado, a pesar de esta extraña mezcla, es bastante agradable. Los brasileños van aprendiendo a disimular la naturaleza low-cost de sus productos.
El interior se nota más refinado que las generaciones pasadas, aunque parece que seguirá sin ser el referente en cuestiones de calidad. Si bien los aires sobrios de la marca se dejan ver en el tablero, el tono claro de los plásticos que lo recubren seguramente será duro, bastante lejano a los modelos europeos. En cuestiones de equipamiento, podemos ver que contará con el sistema de entretenimiento con pantalla táctil, entrada auxiliar y sistema de navegación; aire acondicionado, equipo eléctrico y computadora de viaje complementan la lista.
A nivel mecánico la oferta se mantiene amplia, con pequeños motores que sin ser una oda a la eficiencia consiguen un rendimiento de combustible bastante aceptable. Estará disponible con un motor de 3 cilindros de 1.0 litro y 72 caballos —76 si quemas etanol—, además del 1.6 litros de 101 caballos de fuerza —ya conocido en el VW Gol— y, como tope de gama, una variante de 16 válvulas con 110 hp. De momento sólo cuenta con cambio manual de 6 velocidades, aunque seguramente incorporará más adelante la caja automática i-Motion que recientemente se estrenó en el Gol en México.
En cuanto a su llegada —más bien, regreso— a nuestro país, lo haría únicamente en su variante off-road: el Crossfox. Pero faltará tiempo para que esto sucediera, porque aún no se presenta la nueva generación de esta versión en Brasil.
Vía | alvolante.it | car.blog.br
