“Me llamo Bond, James Bond” o “Agitado, no revuelto”, son dos frases que permean parte de la cinefilia de varias generaciones; también está la acción, para mantener al mundo libre, pues, valga la redundancia, libre, los gadgets y las bellas mujeres. Y por supuesto, los vehículos que el agente 007 ha destruido para horror del pobre Q.
Al respecto habrá que recordar que hace tres años RM Auctions, vendió “el coche más famoso del mundo”, el Aston Martin DB5 utilizado por Sean Connery en la película Goldfinger y Thunderball por la friolera de 2,900,000 Libras.
Ahora, le ha tocado el turno al casi recién recuperado Lotus Esprit Series 1 'Submarine' Car, mismo que será subastado el 8 y 9 de septiembre en la capital británica.
El vehículo mencionado fue usado en la película de 1977 The Spy Who Loved Me dentro de una de las escenas más memorables del cine y, por supuesto, de la saga de James Bond.
Por años, el Lotus blanco encabezó las votaciones cuando se les preguntaba a los amantes del cine sobre su vehículo 007 favorito. Conocido como ‘Nellie Wet’, fue construido por Perry Oceanographic, con sede en Riviera Beach, Florida y manipulado por Don Griffin, un ex SEAL de la Marina EEUU y piloto de pruebas de Perry, durante la filmación.
Como detalle curioso cabe recordar que para la filmación se usaron seis Lotus, pero sólo este modelo era 100% funcional.
Después de la filmación de las escenas bajo el agua en las Bahamas, el Lotus Esprit fue enviado a Long Island, Nueva York, donde se mantuvo en una unidad de almacenamiento con un alquiler pagado por adelantado de 10 años.
En 1989 fue subastado “a ciegas”. Los ganadores fueron una pareja que casi se va de espaldas cuando, al ser retirada la manta que lo cubría, descubrieron que se trataba del legendario auto conducido por Roger Moore.
Durante los siguientes años el Lotus fue mostrado en varias ocasiones, incluyendo una breve exhibición en el Petersen Automotive Museum.
