Si hay una marca que poco se asocia con el deporte motor (en la actualidad), esa es Bentley. Los "Lords" inlgeses también tienen ganas de correr en circuito y por eso, a principios del siglo XX, Bentley participaba activamente en las carreras de autos en Europa, y aunque no hayamos escuchado mucho recientemente, recordemos que de 2001 a 2003, el Speed 8 tuvo una memorable participación en el campeonato de resistencia.
Mientras lees estas palabras, Bentley está poniendo a punto la segunda generación del GT3 para la temporada 2018 del WEC (World Endurance Championship), categoría en la cual han cosechado 120 podios y 45 victorias en 528 carreras.
Los ingenieros de Bentley Motorsport trabajan en conjunto con sus socios de M-Sport, para sacarle el mejor provecho a este lujoso vehículo y convertirlo en un auto de carreras de 1,300 kg de aluminio en su mayoría y sacando provecho al motor V8 biturbo de más de 550 hp.
El trabajo en el túnel de viento fue cauteloso para colocar alerones y demás apéndices aerodinámicos justo donde más los necesita para generar más downforce y por lo tanto, mejor adherencia.
Mientras comienza la temporada, Bentley probará este nuevo GT3 en el Reino Unido, Francia y Portugal, incluso con simulaciones de 24 horas. Así es como se defiende un campeonato.
