Como si de una película de suspenso se tratara, previo a la celebración por la entrada del nuevo año, Carlos Ghosn se fugó de Japón, abandonando de una forma no muy clara su arresto domiciliario y volando hasta Beirut, donde permanece refugiado.
Como se recordará, el exdirectivo automotriz fue sentenciado a un estricto arresto domiciliario en Japón por presuntos negocios ilícitos y lavado de dinero, mismo que lo llevaron a pasar otro juicio en Francia. Ahora, Carlos Ghosn vuelve a ser noticia de primera plana debido a que recientemente se reportó que abandonó su arresto domiciliario y tomó un vuelo hacia Beirut, Líbano.
"Ghosn llegó el domingo al aeropuerto de Beirut, aunque la manera de la que ha salido de Japón no es clara" reportó la fuente de seguridad encargada del caso y los informantes libaneses que proporcionaron la información. Conforme la noticia trascendió, se fueron develando diversos detalles, como el hecho de que, al parecer, el magnate de la industria automotriz salió de su casa en Japón escondido en el estuche de un instrumento musical, propiedad de uno de los integrantes de un grupo que fue contratado para tocar en el domicilio de Ghosn.
Según versiones de diversos medios europeos, el contingente viajó más de seis horas por carretera hasta el aeropuerto internacional Kansai, donde Ghosn tomó un vuelo privado que lo trasladó hasta Estambul, desde donde se trasladó hasta Líbano.
Se dice que el cerebro detrás de esta espectacular fuga fue Carole, esposa de Ghosn, así como algunos de sus hermanos. Posterior a la huida, la policía turca detuvo a siete personas, entre ellas cuatro pilotos, bajo sospecha de haber ayudado a Ghosn en su fuga hacia Líbano.
Si crees que Ghosn está escondido en alguna oscura cueva en las montañas de Líbano, te equivocas, el exmandatario de la Alianza Renault-Nissan está cómodamente instalado en su mansión, protegido por un sofisticado sistema de seguridad e incluso ya se dio el lujo de hacer unas declaraciones a MTV Líbano donde declaró que: No he huido de la justicia. He escapado de la injusticia y de la persecución política.
De acuerdo con la información de EFE, Ghosn pudo realizar todo este periplo gracias a que aún conservaba sus pasaportes franceses, celosamente escondidos en su domicilio. Diversas fuentes afirman que se refugió en el Líbano, dado que ahí podría recibir un trato “más digno”, en el remoto caso de que su juicio prosiga en ese país del medio oriente.
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