Nos queda más que claro que los SUV han enamorado a una gran parte de los consumidores y que esta tendencia no está para nada cerca de comenzar a estabilizarse o bajar. Por ello muchos fabricantes de exóticos han tenido que adaptar su ADN a estos nuevos productos. Ferrari fue uno de ellos y ya han admitido que están acelerando el proceso para tener listo su SUV en 2022 y así competir con el Lamborghini Urus, Bentley Bentayga, Aston Martin DBX y compañía.
En una entrevista con los colegas de Autocar el líder del departamento técnico, Michael Leiters, confirmó que el desarrollo de este vehículo ha llevado nuevos retos a la marca, pues es un segmento nuevo para ellos y deben encontrar balances entre el ADN deportivo de la marca, pero también en la comodidad implícita de los SUV.
Por otra parte se ha confirmado que se montará sobre la arquitectura de adaptable de motor frontal-central (el motor va en la parte frontal del auto pero la mayoría del mismo está montado tras el eje delantero, dando un mejor balance de pesos). A su vez, están analizando la posibilidad de darle motores V6, V8 o V12, aún en esta etapa prueban esas soluciones, pues al menos esa plataforma permite la adición de algún nivel de electrificación, ya sea un sistema microhíbrido o uno híbrido enchifable.
Otro reto que han dado a conocer es la forma en la que integrarán su interfaz de entretenimiento, que hasta ahora tenía un enfoque total en el conductor con mínimos detalles de control para el copiloto.
Finalmente han confirmado que será un vehículo para cuatro pasajeros. En el lado de rumores se dice que tendrá una suspensión con altura ajustable y control de balanceo de carrocería, además del arsenal de opciones de personalización que la marca ha ofrecido a lo largo del tiempo.