El Fiat 500 eléctrico se está convirtiendo dolor de cabeza para Stellantis en los mercados donde se comercializa y su red de concesionarios. Y es que la demanda es tan baja y el inventario tan elevado, que algunos distribuidores prefieren proponer el coche con una atractiva modalidad de renting, es decir, un contrato de alquiler de coches a largo plazo, en este caso de más de dos años, al precio de cero pesos al mes y sin tarifa inicial.
No se trata de un error ni de una promoción especial sobre una sola unidad o del algún tipo de broma. No, los más de 64 Fiat 500e que un concesionario de Denver, Colorado, en Estados Unidos, tiene en stock, están disponibles en esta modalidad. Su objetivo es muy sencillo, quitárselos de encima y de paso generar una enorme publicidad.
Larry H Miller Chrysler Dodge Ram Fiat es el citado concesionario en Denver. Hace unos días, The Autopian hizo eco de una promoción de este concesionario por un leasing de 27 meses y 16,000 km al año del nuevo Fiat 500e por cero dólares al mes y sin entrada.
La letra pequeña sugería que el cliente tendría que pagar casi 1,300 dólares de impuestos locales y federales, más 395 dólares de preparación del coche. Al final, el cliente acabaría pagando unos 62 dólares al mes.
Carson Giardini fue uno de los clientes que aprovechó uno de esos 500e por cero dólares al mes y contó el proceso a The Autopian. “Hace poco contraté el renting de un 500e. Fue caótico, con 35 personas intentando conseguir uno simultáneamente”.
Por ese precio, aunque seas alérgico a los coches eléctricos, claro que resulta atractivo. Carson explicó que sólo tuvo que hacer un pago único de 1,111 dólares, por los impuestos y la preparación del coche. “Aunque el coche aún no estaba preparado para la entrega, espero recogerlo el lunes o el martes”, añadió.
De esta forma, Carson se llevará un Fiat 500e de 118 hp, con la batería de 42 kWh que homologa una autonomía en ciclo WLTP de 332 km por recarga. No es un coche para realizar grandes viajes, pero básicamente se lleva un automóvil gratis, cuyo precio de venta es de 34,095 dólares, teniendo sólo que abonar los impuestos y el equivalente al impuesto de circulación local cada año.
El concesionario se queda con todos los incentivos y ayudas para la compra o renting de un coche eléctrico que propone el estado de Colorado, de hasta 7,500 dólares. Es decir, el concesionario no regala el coche, aunque es poco probable que le salga rentable.
Y es que dentro de dos años, tendrá que recuperar algunos de estos coches, pues la última cuota es de más de 17,000 dólares en caso de que el cliente se quiera quedar el coche en propiedad. Lo cual, dicho sea de paso, debería ser el precio de venta del Fiat 500e para que tuviera el mismo éxito que su predecesor.
El verdadero interés del concesionario es sobre todo deshacerse de un enorme stock de coches que nadie quiere y, de paso, hacerse una enorme publicidad y rascar algún bonus de Stellantis por haber llegado a objetivos con el Fiat 500e. Aun así, el Fiat 500e no se vende.
De hecho, la fábrica del Fiat 500e lleve parada desde el pasado mes de septiembre, esto para evitar que Fiat tenga un stock inmenso de coches que no puede vender. Y es tan problemático que la planta seguirá sin producir el 500e hasta finales de enero de 2025.
Las razones de la fría bienvenida de este coche, que contrasta con el éxito arrollador del Fiat 500 con motor a gasolina (más de dos millones de unidades entre 2017 y 2020), hay que buscarla esencialmente en su precio. De manera general, los coches del grupo Stellantis son demasiado caros, lo que se traduce en una reducción constante de ventas. Eso es lo que llevó al "despido" del CEO del grupo, Carlos Tavares.