El circuito de Linas-Montlhéry, en Francia, que en la década de los 20´s y 30´s fue parte del calendario de Fórmula 1, hoy toma protagonismo al transformarse en pista de pruebas para vehículos autónomos.
Ahora bajo el nombre de Teqmo, esta pista se convierte en el escenario ideal para que fabricantes, sobre todo de origen francés, puedan exponer a sus coches autónomos a un panorama “real”.
El espacio para las pruebas es de 12 kilómetros y se adaptó con simulaciones de áreas urbanas, zonas de estacionamiento y diversas maniobras cotidianas, como giros de distintos ángulos y frenadas.
Junto al trazado, se instalaron distintas infraestructuras de comunicación, con cobertura 5G incluida, de manera que puedan retroalimentarse con los automóviles de conducción autónoma que se encuentren en acción.
Era de esperarse que empresas como Renault y Peugeot se unieran al proyecto, pues serán los principales beneficiados en este espacio. Otras empresas del sector de telecomunicaciones también se han asociado, como Bouygues Telecom, Ericsson y Orange.
Vicent Abadie, experto en vehículos autónomos de PSA explica según Motor1.com, que se necesitan entre 1 y 2 millones de kilómetros de pruebas para poder validar un nivel de conducción sin conductor.
Por ejemplo, este grupo automovilístico, además de las pruebas que va a realizar en Linas-Montlhéry, dispone de 20 prototipos con autorización para rodar en ambientes de tránsito real, mismos que han acumulado 170,000 kilómetros reales desde el comienzo de los test, en 2015.
