Desde hace varios años, Porsche ha estado trabajando en el desarrollo y producción de combustibles sintéticos, también conocidos como eFuels, y los ha planteado como una alternativa sustentable que permitirán darle una mayor vida a los motores de combustión interna.
Para ello, la firma alemana realizó una expedición a la cima de la cresta occidental del volcán Ojos del Salada de Chile, con dos 911 Carrera 4S de la generación actual, preparados para enfrentar estos caminos complicados y cuyos motores fueron alimentados con combustibles sintéticos, y de paso, estableció un nuevo récord, pues ningún coche había llegado nunca hasta los 6,734 metros sobre el nivel del mar.
El objetivo fue demostrar, una vez más, que estos combustibles funcionan perfectamente bajo cualquier condición de uso. De hecho, no se realizaron cambios en los motores de los dos 911, lo que significa que ambos cuentan con un seis cilindros biturbo de 3.0 litros, con 443 hp, alimentados con los eFuels que Porsche produce en Chile.
Este tipo de combustibles sintéticos se fabrican a partir de agua y dióxido de carbono, utilizando energía renovable, lo que permite un uso potencial casi neutro en CO₂ de los motores de combustión interna, ya que el dióxido de carbono, capturado durante el proceso de producción del combustible, equivale aproximadamente al CO₂ emitido durante el uso del automóvil.
Porsche ha invertido en este campo como parte de su estrategia “Doble E” (e-fuels y electromovilidad) para impulsar los coches deportivos del pasado, presente y futuro. La primera planta piloto integrada para producir combustibles sintéticos, “Haru Oni” en Punta Arenas, Chile, inició su producción a finales de 2022.
El fabricante de automóviles señaló que el equipo pasó dos semanas en altitud para aclimatarse, pero que los autos se adaptaron fácilmente, ajustando automáticamente la base de combustible bajo estas condiciones.
