Red Bull además de ser una marca reconocida por su principal producto energético, también ha cobrado fama por sus espectaculares activaciones, la mayoría de ellas por supuesto enfocadas en deportes extremos, entre ellos el Drifting. Sin embargo fue justo esta disciplina la que ha puesto a la marca de origen austriaco en problemas serios con el gobierno de Ucrania.
Resulta que la firma del toro rojo, decidió filmar uno de sus espectaculares videos en la plaza que acompaña a la catedral de Santa Sofía, ubicada en Kiev, Ucrania. Tanto la plaza como por supuesto la misma catedral, están declaradas por la UNESCO, como patrimonio de la nación, por lo que al haber realizado la filmación sin previa autorización, se ha convertido en un auténtico problema.
De acuerdo con el representante del gobierno en cuestión, Red Bull solicitó el permiso pertinente para dicha grabación, sin embargo el permiso fue denegado, por lo que la firma de bebidas energéticas procedió a la filmación de forma clandestina. Esta grabación se llevó a cabo muy temprano por la mañana y con nulas medidas de seguridad, poniendo en riesgo a los peatones, tráfico local y dañando el más de 2,000 metros cuadrados de la superficie.
El equipo de producción incluso trató de limpiar las huellas de los neumáticos dejadas en el piso, pero sin éxito aparente. Por lo que el gobierno de Kiev probablemente procederá de manera legal en contra de Red Bull.