De acuerdo con datos de la Autoridad Federal de Transporte Automotor de Alemania, las ventas de coches 100% eléctricos en este país se desplomaron un 37% en julio pasado, en comparación con el mismo mes pero del 2023, la mayor caída desde que el gobierno local recortó los incentivos para los vehículos eléctricos en diciembre pasado, lo que provocó que los fabricantes de automóviles y los proveedores se preocuparan por sus enormes inversiones en electrificación.
Además de la falta de subsidios, que encareció los vehículos eléctricos, los analistas también culpan a la escasez de vehículos eléctricos accesibles que hay actualmente en el mercado.
Como era de esperar, la desaceleración de los vehículos eléctricos obliga a los fabricantes de automóviles a reconsiderar sus planes futuros y no eliminar del todo a los motores de combustión interna, lo que les dificulta cumplir con las estrictas regulaciones de emisiones de la Unión Europea.
“Hasta ahora, el aumento de la movilidad eléctrica está demostrando ser insostenible. El mercado ha perdido todo impulso y muchos clientes dudan de las perspectivas de los coches eléctricos”, comentó Constantin Gall, consultor de Ernst & Young.
Además de Alemania, el mayor mercado de automóviles de Europa, otros países también están experimentando una demanda lenta de vehículos eléctricos. Suecia, que se considera líder en vehículos eléctricos entre los mercados europeos, también registró una caída significativa del 15% en la venta de vehículos eléctricos en julio. En un contexto similar, las ventas de autos eléctricos cayeron 19% en Suiza, otro mercado fuerte para los autos de cero emisiones.
