Desde hace algún tiempo, Mercedes-Benz se ha encargado de relegar la importancia del SL con modelos como el AMG GT roadster y el nuevo Clase S convertible, sin embargo, no están listos para eliminar a su roadster insignia del portafolio de productos y la siguiente generación podría hacer uso de las ventajas que tienen sus hermanos, más específicamente la plataforma del AMG GT.
El nuevo SL podría cambiar a una configuración de cuatro asientos para marcar una diferencia clara con el GT. De ser así, tendrá una versión alargada del chasis del auto de AMG. Los motores que utilizará seguramente serán el nuevo seis en línea y un V8 con sobrealimentación. Es muy poco probable que veamos el motor V12 en la siguiente generación ya que la marca está concentrándose más en motores más pequeños y eficientes.
Seguirá haciendo uso extensivo del aluminio y el túnel de transmisión de fibra de carbono también permanecerá en el nuevo auto. Para ahorrar más peso se espera que el techo duro retráctil sea cambiado por uno de lona. Existen rumores de una posible versión coupé. Estos cambios le darían una identidad completamente nueva al SL, algo que no está nada mal si tomamos en cuenta que tiene que evolucionar para mantenerse relevante.
El nombre SL ha representado a los convertibles deportivos de la marca por mucho años, pero no hay que olvidar a los coupés deportivos que utilizaron estas siglas, como el mítico SL500 de la década de los 50. El crear una versión coupé del SL sería un regreso a esas épocas en las que el SL era uno de los autos más importantes de Mercedes, no como ahora que prácticamente pasa desapercibido.
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