El invierno tiene sus consecuencias en el mundo automotriz, no solo no hay carreras debido a las condiciones, sino que pistas públicas, como el Nürburgring, cierran sus puertas.
Pero ser piloto de la Nürburgring Driving Academy tiene sus beneficios, y el instructor Andy Gülden ha tomado el volante de un auto Formula para recorrer el famoso Circuito del Norte en condiciones temerarias.
Si manejar el famoso Nordschleife de más de 20 kilómetros y 150 curvas en seco es uno de los mas grandes retos para cualquier piloto del mundo, y manejarlo con lluvia es todavía más difícil, a -16 grados centígrados y con una pista cubierta de nieve y hielo, cualquier error mínimo significaría una visita a la barda de contención.
Es por eso que pocas veces escuchamos que el pedal esté presionado a fondo, además que el volante casi siempre está en contradirección, hasta en las rectas.
Por estas razones es que vemos una vuelta muy lenta pero igualmente divertida. Claro que tener la habilidad para poder hacerlo es punto y a parte.