Ataques de ira tenemos todos, pero de ahí a terminar incendiando un coche, hay una línea difícil de cruzar. Pourmohseni Hadi la ha cruzado cuatro veces. Todo comenzó cuando compró un BMW M6 en 2008 y tuvo problemas con la transmisión. La marca no respondió y, como protesta, terminó destrozándolo con un hacha en el Auto Show de Frankfurt en 2013.
No conforme con su triste historia, el hombre reparó su M6 para, meses más tarde, en el Auto Show de Ginebra, repetir la historia. El tercer incidente lo escribió en 2015, cuando prendió fuego a un BMW Z3. Ahora, con su radicalismo habitual, Hadi incendió un BMW Serie 7 frente al cuartel general de la firma alemana en Múnich... porque una carta de queja parece no ser suficiente.
A nuestro parecer, hubiera sido mucho más sencillo reparar el auto y jamás volverse a comprar un BMW, pero Hadi ha llevado su relación con la marca a un nivel enfermizo: comprar sus autos y destrozarlos. La única duda que nos queda es si en Alemania es legal quemar un auto en vía pública. Eso y por qué Hadi sigue gastando su dinero en estos espectáculos.
