Uno de los autos de culto con más seguidores en México llega en su séptima generación y en Motorpasión por fin tuvimos la oportunidad de probarlo y compararlo con dos grandes hot-hatches, el Suzuki Swift Sport y el recién llegado Renault Clio RS.
¿Será que el hot hatch por excelencia durante muchos años quiere seguir conquistando corazones de nuevos y viejos entusiastas? Si confiamos en la historia y herencia del GTI podemos tener asegurado que el auto seguirá manteniendo su estatus. Pero a pesar de ello siempre nos podemos llevar sorpresas de todo tipo.
Motor y aceleración a la medida
Desde que era "La Caribe" hasta su más reciente generación, el GTI ha sido el auto insignia en el mundo de los hot-hatches. Esta más reciente versión del auto cuenta con casi todos los ingredientes para ser nuevamente uno de los grandes hatchbacks actuales en el mercado, manteniendo un look deportivo sutil y a la vez atractivo y distinguible.
Después de la conquista visual viene el motor. El 2.0 TSI de 220 hp empata perfectamente con el tamaño y peso del auto, dando buena respuesta a medias y altas revoluciones, siendo su único problema (como el de todos los turbos) generar potencia a bajo régimen. Aunque hay que reconocer cuánto han mejorado los turbocargadores en los últimos años, aún es necesario esperar un poco para que después de que las turbinas giren, el aire entre al motor, y el auto responda.
Esto es más notable al manejar en la misma sesión Swift Sport, el único con motor natrualmente aspirado de los tres, y cuya entrega lineal de potencia es mucho más cómoda y manejable tanto en ciudad como en carretera y manejo deportivo, aunque con mucho menos poder y pérdida de potencia en relación con la altitud.
La aceleración del Volkswagen Golf GTI, a pesar de contar con un "golpeteo" producto de la inducción forzada, no viene acompañada de la misma cantidad de emociones que el Clio RS. Esto no quiere decir que el GTI sea lento, sino que la sensación de movimiento al acelerar es menos explosiva que el hatchback francés. En este sentido, el GTI se percibe como un deportivo más refinado.
Del motor a las ruedas delanteras
Una de las grandes ausentes en el GTI es la opción a una transmisión manual. Como ya es costumbre en nuestro país, las marcas sólo consideran la transmisión automática y no ofrecen sus autos con la opción de tres pedales y más diversión, como nos gusta a los auto-entusiastas. En esto también entra en juego el precio de los autos, pero esa es otra historia que tocaré más adelante.
Ahora, a hablar del cambio DSG del GTI. Sí, es rápido y mejor puesto a punto que la del Clio RS para el día a día, pero a pesar de tratarse de uno de doble embrague, tanto en modo automático como en manual los cambios son perceptibles, de manera mínima, pero lo son.
De igual manera, al jalar la palanca hasta abajo se entra en un modo de funcionamiento "Sport" que realiza los cambios a revoluciones más altas. Ponerlo en dicho modo durante situaciones de tráfico ligero o de manejo en ciudad es ilógico e incómodo —no fue concebido para eso—. Su razón de ser, más bien, es para los principiantes, porque a manos con más experiencia y para lograr un manejo más deportivo es mejor colocar la caja en modo manual.
Deportivo...
Doscientos veinte caballos de fuerza y las siglas GTI son una buena presentación para el auto. A esto añadimos una dinámica muy buena y sobre todo divertida, y un comportamiento en curvas es bastante estable y carente del excesivo subviraje característico de los autos de tracción delantera, y tenemos un deportivo en mano.
La dirección es precisa y con la dureza justa. En curvas es difícil sentirse fuera de control y peleando contra el auto. A pesar de ser de los gordos del grupo, su manejo es sencillo; en sensación de agilidad, es superado únicamente por el divertido y pequeño Swift Sport, que por su ligereza resulta aún más divertido en curvas, aunque con un tren motor mucho menos explosivo.
Una de las claves del GTI es la adopción de suspensión más dura, muy buena para el manejo deportivo, pero en ciudad es un tanto incómoda y, combinada con las llantas de bajo perfil, no hacen del Golf GTI un city-car deportivo ideal en nuestras calles llenas de baches y topes. Aún así, resulta mucho más cómodo que el Clio RS, cuya aspereza llega a cansar al cabo de unos kilómetros en la selva urbana.
...pero no al extremo
Al GTI le vendría muy bien poder cambiar el modo de manejo y que éste afectara tanto a la suspensión como a la caja de velocidades, dirección, y, lógicamente al motor. Sin embargo, la opción se ha limitado a apagar el control de tracción y poner el control de estabilidad en modo sport, pero es posible no desactivarlo completamente.
Además de esto no hay un botón que haga esta operación al presionarlo. Para realizar este cambio es necesario realizar varios clics "touchs" en el sistema de infotenimiento. Esto es bastante incómodo cuando se quiere cambiar de modo de "conducción" rápidamente. El proceso requiere detenerse para poder realizarlo o arriesgarte a chocar si lo quieres hacer mientras estás en movimiento.
Esto también se expande a la estética del auto, cuyo interior tiende más al lujo que a la deportividad, aunque eso es clara mención que en dicho renglón el GTI es el mejor de los tres en este renglón. Sobre todo al compararlo con el interior del Clio RS, cuyos materiales duros al tacto dejan qué desear. Con el Swift Sport y su austeridad no hay punto de comparación.
Aunque el GTI cuenta con una gran dinámica y un excelente motor, hay puntos a mejorar como el peso y la falta de transmisión manual o carrocería de dos puertas. Sin mucho trabajo, Volkswagen podría ofrecer un producto para los más puristas, sobre todo considerando que el coche es fabricado en México.
Sin embargo, el problema más grande en el Golf GTI es su precio. Cuesta trabajo creer que hace diez años un GTI costaba cerca de $210,000 pesos y $21,000 dólares en Estados Unidos; hoy cuesta sobre $422,900 pesos (casi 480,000 en la versión probada), mientras que sobrepasando la frontera del norte de México su precio es desde menos de los $25,000 dólares. Pero eso de los impuestos y perspectivas de mercado es otro tema.
Ficha técnica
Versión probada | NAV, Asist. estacionamiento, R18 | |||
Cilindrada | 1,984 cm³ | Tipo de tracción | Delantera | |
Bloque motor | 4 cilindros | Combustible | Gasolina | |
Potencia máxima (hp @ rpm) | 220 hp @ 6,200 rpm | Capacidad del depósito | 50 litros | |
Par máximo (lb-pie @ rpm) | 258 lb-pie @ 4,400 rpm | Consumo urbano | 8.6 km/l | |
Masa en vacío | 1,369 kg | Consumo extraurbano | 15.4 km/l | |
Velocidad máxima | 246 km/h | Consumo mixto | 12 km/l | |
Aceleración 0-100 km/h | 7.9 segundos | Capacidad maletero | 380 litros | |
Transmisión | DSG de 6 velocidades | Precio | 479,000 pesos |
Precios de Golf GTI en México
- Golf GTI DSG - $422,200 - $479,900
El coche para esta prueba ha sido prestado por Volkswagen. Para más información consulta nuestra guía de relaciones con empresas
Seguir leyendo: Suzuki Swift Sport vs Renault Clio RS vs Volkswagen Golf GTI (Resultados)
Fotografía | Gerardo García
En Motorpasión México | Comparativa: Suzuki Swift Sport vs Renault Clio RS vs Volkswagen Golf GTI (Parte 1)