El Volvo XC90 fue sólo la punta de la lanza que el fabricante sueco preparó para los próximos años. Si las nuevas generaciones de sus productos siguen los pasos del SUV de la casa —como lo hace el nuevo Volvo S90—, pueden dormir tranquilos; encontraron la fórmula para convertir a cada uno de sus modelos en la referencia de su segmento.
La propuesta ya no va sólo sobre seguridad; eficiencia, lujo, conectividad y desempeño se conjugan para plantar cara a las propuestas alemanas más exitosas. Es momento de que el Volvo S90 salga al ataque. Previo a su lanzamiento oficial, que tendrá lugar en el Auto Show de Detroit en enero, el fabricante sueco nos cuenta los primeros y jugosos detalles de su nuevo sedán.
El Volvo S90 es un XC90 sedán, y eso es bueno
Si tuviéramos que resumir todas las novedades del Volvo S90 en una línea, sería ésa. Diseño, tecnología y motores fueron heredados del XC90. El diseño de los faros, por ejemplo, adopta la iluminación LED en forma de martillo —de Thor, asegura la marca— y es fiel al Coupé Concept presentado hace algunos años.
El Volvo S90 quiere que despegues la mirada del BMW Serie 5, del Mercedes-Benz Clase E y del Jaguar XF.
La silueta, sólida y elegante, desemboca en una trasera bastante singular, de fuerte sabor europeo y que tiene como protagonistas al par de calaveras en forma de C. No se han confirmado sus dimensiones, pero no esperes nada abajo de los 4.85 metros que mide el S80 actual, sedán al que reemplaza.
El habitáculo es casi una réplica del XC90. Tenemos los trazos minimalistas, la enorme pantalla tipo tablero que alberga el sistema de infotenimiento Sensus Connect y bocinas por doquier, que seguramente también ofrecerán la opción de replicar la sede de la Orquesta Sinfónica de Gotemburgo.
Conducción semiautónoma y un arsenal completo de asistencias de manejo
Ahora bien, en el campo de la seguridad y de la tecnología, el Volvo S90 se coloca como el más completo de su categoría —e incluso de segmentos superiores. La lista de asistencias no sólo incluye alerta de colisión con frenado automático, alerta de abandono involuntario de carril y monitoreo de punto ciego, suma detección de peatones, control de velocidad crucero adaptativo, alerta de conductor cansado, detector de animales y, como carta de presentación, un sistema de conducción semiautónoma, en el que a velocidades inferiores a 50 km/h, el S90 se mantiene en su carril, acelera y frena por sí mismo.
Todo lo anterior, sumado a la estructura sólida, los cinturones de seguridad activos y las múltiples bolsas de aire lo colocan un paso más cerca de cumplir la promesa de Volvo para 2020, en la que aseguran que nadie morirá dentro de sus coches para tal fecha.
En lo que respecta a motorizaciones, Volvo no ha confirmado las cifras exactas de potencia de las tres opciones mecánicas del S90, pero deben ser idénticas a la del XC90. En primer lugar tenemos el motor T5 de 2.0 litros de 245 hp; en segundo, aún más interesante, el 2.0 litros con turbocargador y supercargador, de 320 hp; como tope de gama, una variante híbrida enchufable que utiliza este motor turbosupercargado y uno eléctrico para superar los 400 hp.
El Volvo S90 estará a la venta en 2016
El debut oficial del Volvo S90 tendrá lugar en el Auto Show de Detroit, en enero del próximo año. Las ventas comenzarán en el transcurso de 2016, con especial foco en Norteamérica (en Estados Unidos, en concreto) aunque, al tratarse de un modelo global, un buen puñado de sus clientes provendrán de Europa. A México deberá aterrizar a finales del próximo año o principios de 2017.
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