No es un secreto que la industria automotriz estadounidense se tambaleó de gran forma durante 2008 tras la crisis financiera. Varias marcas de los grupos automotrices más grandes del país vecino del norte desaparecieron; Hummer y Pontiac son un ejemplo.
FCA —Chrysler solamente en ese entonces—, fue una de quienes más sufrieron tal suceso al punto que tuvo que ser vendida. Fiat la adquirió, pero poco después de su compra, Sergio Marchionne, CEO de FCA, anunciaba que el grupo estaba a la venta. Intentó negociar con varios otros grupos automotrices, pero no tuvo éxito.
Volkswagen y General Motors rechazaron hacerse de tal grupo, sin embargo. Recientemente y como cuentan nuestros colegas de Automotive News, algunas armadoras chinas ya comenzaron a hacer sus ofertas para hacerse de Chrysler, Dodge y Jeep. A su vez hay reportes en los que se sabe que representantes de FCA ya han viajado a China para negociar, de igual forma algunos representantes de marcas chinas han visitado las oficinas de Chrysler en Estados Unidos con el mismo fin.
La economía de FCA no ha podido recuperarse del todo y si algo es seguro es que la industria automotriz china crece a pasos agigantados. Ya han comenzado sus planes de expansión a diferentes países. Algunas marcas con más éxito que otras, pero es seguro que preparan una gran ofensiva comercial.
Adquirir FCA, les daría acceso a una gran infraestructura de fabricas y distribuidores en Estados Unidos y algunos otros países para poder llevar sus productos. Lo último que se sabe es que FCA rechazó una oferta de una marca china, no porque no estén de acuerdo con traspasar a los chinos las marcas del grupo, sino porque no ofrecieron la cantidad necesaria. Al ver el nulo interés de otros grupos Europeos, o estadounidenses, todo apunta a que en algún momento FCA pasará a manos de los chinos.
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